MATARÓ (BARCELONA), 19 (EUROPA PRESS)
Vecinos de Mataró (Barcelona) protestan cada tarde ante un prostíbulo del barrio de Vista Alegre para disuadir a los potenciales clientes del local. Los manifestantes se quejan de que el prostíbulo, que se encuentra en una casa privada, ocasiona problemas de ruido y de convivencia en la zona debido al continuo tránsito de personas que frecuentan la casa de citas.
En declaraciones a Europa Press, una de las vecinas del barrio y portavoz del colectivo de vecinos, Susana, denunció que la "actividad" que se realiza en la casa, situada en la calle Salvador Espriu, es la "prostitución". Los vecinos averiguaron que se trataba de un local de citas por la "afluencia de gente" que acudía cada noche a las puertas de la casa unifamiliar.
"Al darnos cuenta de lo que sucedía en nuestra calle, decidimos recoger firmas para denunciar la situación al Consistorio", explicó Susana. Actualmente, se concentran cada tarde a la puerta del prostíbulo para "disuadir a los clientes", explicó la portavoz, que no quiso identificarse por miedo a "represalias". Susana comentó que la 'madame' del prostíbulo se ha "enfrentado" a ellos en diversas ocasiones y "algún cliente también", añadió.
Otro de los motivos que les preocupa es la construcción de un colegio enfrente del edificio. Por esta razón, el colectivo de vecinos han "denunciado" esta actividad, que según los afectados es "inadmisible". Los habitantes de las casas colindantes al prostíbulo están "muy agradecidos" por los apoyos de entidades del barrio y por el "asesoramiento y apoyo mostrado" hacia ellos, explicó Susana.
Se da la circunstancia de que el local es de alquiler y el propietario del inmueble ya ha confirmado a los vecinos que no renovará el contrato a la actual inquilina cuando éste venza, el próximo mes de agosto. Es por ello también que los Mossos d'Esquadra, que ya han recibido la denuncia de los vecinos, no actuarán directamente, sino que esperarán a que el contrato expire, según ha podido saber Europa Press.
Por su parte, la encargada del local del prostíbulo no quiso hacer declaraciones, pero permitió grabar el interior del prostíbulo para así poder "demostrar" que no se trata de "ninguna actividad ilegal". La propietaria del piso destacó que si los vecinos querían calificar el piso de alguna manera "lo llamaran ilícito", concluyó.