Xavier Crespo renuncia finalmente a ser el secretario de Seguridad de la Generalitat

Xavier Crespo, alcalde de Lloret
AYTO.LLORET DE MAR
Actualizado: lunes, 21 febrero 2011 22:10

Puig buscará otro relevo para Delort en el cargo

GIRONA, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Lloret de Mar, Xavier Crespo, ha renunciado a su "posible nombramiento" como secretario de Seguridad de la Generalitat, como se había anunciado desde que se formó el Govern de CiU.

"Centraré mis esfuerzos en acabar mi legislatura como alcalde y continuar como diputado de CiU en el Parlament", ha dicho en un comunicado del Ayuntamiento, y así lo ha comunicado ya al conseller de Interior, Felip Puig.

Crespo rechaza la oferta del nombramiento "pasadas estas semanas de preparación del relieve en la candidatura" de Lloret, y asegura que agotará su mandato como alcalde, cargo que ocupa desde 2003 y en el que consiguió mayoría absoluta en las pasadas elecciones.

Fuentes de la Conselleria han informado a Europa Press que Crespo lo comunicó a Puig este fin de semana y alegó "motivos personales".

Puig buscará ahora otro nombre para sustituir en el cargo a Joan Delort, según las mismas fuentes.

El conseller ha mostrado a Crespo su "respeto" por la decisión, aunque la ha lamentado, teniendo en cuenta que era la persona en quien había pensado para el cargo.

HASTA EL ÚLTIMO MOMENTO

El propio Puig confirmó el 3 de enero este nombre, y desde entonces ha mantenido que Crespo iba a asumir el cargo tarde o temprano, en respuesta a las críticas que suscitaba que pasara el tiempo sin que se le nombrara.

El jueves 17 de febrero, Puig debió responder a las críticas de la oposición en sede parlamentaria, durante la presentación de su programa de actuación en el departamento.

Puig negó entonces que hubiera un 'caso Crespo' y aseguró que pronto iba a ocupar el cargo, y elogió al actual secretario, Joan Delort afirmando que le permite hacer un relevo "magnífico".

El diputado Jaume Bosch (ICV-EUiA) afirmó que era difícil imaginar que Puig acumulara en tan poco tiempo "tantos errores y decisiones polémicas", y añadió que el 'caso Crespo' es un "desbarajuste que sería cómico si no afectara a un cargo tan importante".

Pere Calbó (PP) reprochó al conseller "una actitud frívola impropia del rigor exigible" en un nombramiento clave como éste.