El secretario general de UGT-Ceuta, del sector crítico del PSOE, ve "un disparate" mantener al presidente de la Gestora

CEUTA 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de UGT-Ceuta, Antonio Gil, definió hoy como "un disparate con mayúsculas" que el ex secretario de Organización del PSOE regional, Enrique Moya, continúe al frente de la Comisión Gestora que la dirección federal del partido designó a propuesta de la Ejecutiva saliente tras la dimisión de su secretaria general, Antonia Palomo, tras no ser capaz de superar en las elecciones del 27-M los dos escaños que mantenía su grupo desde 2003 en la Cámara local, donde el PP cuenta con 19 representantes.

En declaraciones a Europa Press, Gil, veterano militante socialista, se mostró "incrédulo" ante la última valoración de la Comisión Ejecutiva Federal que, tras un encuentro de su secretaria de Política Autonómica, Carmen Hermosín, con Moya y el presidente del partido, el ex diputado Juan José León Molina, mostró su "máximo apoyo" al trabajo realizado por la Comisión Gestora.

"No me puedo creer que el partido vaya a tirar por la borda las próximas elecciones generales entregando la pala y la tierra a Moya para que termine de enterrar el partido", criticó Gil, quien reiteró que no está en "ninguna carrera por ningún puesto" y aseguró no tener" ningún miedo" a ser expedientado e incluso expulsado del partido, opción que según reconocen fuentes de la anterior Ejecutiva se ha barajado varias veces durante los últimos años.

El líder sindical se ha mostrado dispuesto incluso a "subirme en un autobús e ir a Madrid con todos los compañeros que quieran acompañarnos para explicar a la Ejecutiva Federal qué está ocurriendo en Ceuta, cuál es el sentimiento de la militancia y cuáles son las vías, estrictamente reglamentarias, que proponemos para salir de esta coyuntura".

Gil, como León Molina, se ha posicionado públicamente a favor de alcanzar "el mayor consenso posible" para organizar un Congreso extraordinario u ordinario antes de las próximas elecciones generales con el fin de "estabilizar el partido" y "preparar con todas las posibilidades las próximas elecciones generales, en las que nos jugamos nada menos que el Gobierno de la Nación".

Ambos son además miembros del grupo de militantes denominado 'sector crítico' por no compartir el criterio de esperar más de un año para elegir a una nueva dirección del PSOE ceutí, algo a lo que, a su juicio, se aferran "Moya y compañía" con la única intención de "ganar tiempo".

Los 'críticos' están a punto de completar la recogida de la mitad más una de las firmas entre la militancia socialista local, que según todas las fuentes no supera las 200 personas, con las que podrían solicitar un congreso extraordinario de acuerdo con los Estatutos vigentes. Otros miembros del sector crítico apuntan la posibilidad de celebrar un Congreso ordinario acogiéndose al artículo de los Estatutos que señala que debe celebrarse "entre el tercer y el cuarto año" después del anterior, que tuvo lugar al final del verano de 2004.