Alejandro Albalá confirma que Isa Pantoja era una completa extraña en sus visitas a Cantora

Alejandro Albalá
Alejandro Albalá - EUROPA PRESS REPORTAJES - Archivo
Actualizado: lunes, 1 febrero 2021 20:11

   MADRID, 1 Feb. (CHANCE) -

   Alejandro Albalá se suma a la lucha pública contra Isabel Pantoja y Agustín aportando su punto de vista sobre lo que sucede en Cantora. Sentado en el plató de 'Sálvame', el joven ha explicado alguna de sus vivencias personales de cuando estaba con Isa Pantoja y es que, si algo tiene claro, es que Kiko Rivera está contando toda la verdad sobre la forma de ser de la tonadillera y su hermano.

   Sobre las supuestas burlas que ha recibido Kiko Rivera por parte de su tío Agustín en cuanto a su música se refiere, Alejandro confirma que él estuvo presente en una ocasión en la que Agustín puso la canción de 'Quítate el top' para reírse de su sobrino delante de todo el mundo, una actitud que enfadó mucho al Dj.

   Bajo su punto de vista, Agustín tendría totalmente sometida a Isabel con sus amenazas ya que, en la mayoría de sus discusiones, él le echa en cara a su hermana que dejó su carrera profesional para apoyarla y estar a su lado.

   Confirmando la versión de Isa Pantoja de que se ha sentido desplazada muchas veces en Cantora, Alejandro asegura que en sus visitas a la finca nadie les saludaba, pasaban de largo como si no existieran, una actitud que cambió en el momento en el que necesitaron el dinero de Isa Pantoja. Tras vivir en su propia piel la actitud de Isabel Pantoja, Alejandro explicó que la primera vez que acudió a Cantora fue durante un cumpleaños de la tonadillera cuando él e Isa aún no eran pareja estable. Al día siguiente de la celebración el joven tenía más de cincuenta llamadas de teléfono de parte de Isabel en las que le llamaba "hijo de p..." debido a que hacía tan solo unas semanas que Isa y Alberto Isla habían terminado su relación.

   Aún molesto por la actitud de Isabel Pantoja el día que se conocieron, Alejandro asegura que a día de hoy sigue esperando unas dispulpas por parte de la tonadillera por haberle insultado cuando ni si quiera le conocía.