MADRID, 22 Feb. (EDIZIONES/CHANCE) -
Amaia Salamanca es tan celosa de su intimidad que sus declaraciones a la prensa coinciden, en la mayor parte de las ocasiones, con la promoción de algún proyecto o su asistencia a algún evento como imagen, como ocurrió el domingo en el desfile de Roberto Torretta en la MBFWM. Se sentó en el front row, cruzó dos palabras con la prensa y ahí acabó su papel.
Llegó acompañada de Rosauro Varo, su chico y padre de sus dos hijos, Olivia y Nacho. Sin embargo, no hubo manera de fotografiarles juntos. "Yo he venido a apoyar la moda de Roberto Torretta", le espetó a un compañero cuando le pidió, ya que estaban sentados al lado en primera fila del desfile, que posara junto al empresario. Acto seguido, se ladeó ligeramente y no permitió que la cámara les captase.

Aunque llevan muchos años juntos y tienen una de las relaciones más estables del panorama nacional, procura no mezclar, siempre que puede, su vida personal con la profesional. Eso sí, a los saraos van juntos, pero nadie ha conseguido que la actriz y su chico dediquen una sonrisa a cámara con la que llenar las revistas del corazón.
Amaia Salamanca cuida mucho lo que hace y lo que dice, tanto que no tiene redes sociales. "No quiero informar sobre con quién estoy, dónde me encuentro o a dónde voy. Facebook e Instagram son herramientas poderosas en cuanto a promoción, pero roban intimidad. No compensan. Prefiero separar mi vida laboral de la personal", confesó a la revista SModa en una entrevista.