Carolina de Mónaco, Carlota Casiraghi y Gad Elmaleh, juntos en Saint-Tropez

Carolina de Mónaco, Carlota Casiraghi y Gad Elmaleh, juntos en Saint-Tropez
Foto: GETTY 

MADRID, 28 Ago. (CHANCE) -

   Carolina de Mónaco no puede ocultar la sonrisa por el actual feliz momento que vive. La princesa ha pasado los últimos días antes de la boda de su primogénito, Andrea Casiraghi, junto a su hija Carlota y la pareja de esta, el actor Gad Elmaleh, en Saint-Tropez, según recoge la revista '¡Hola!'.

   Los tres han disfrutado de varias jornadas en el mar a bordo del yate de la princesa, el 'Pachá III', en aguas de Saint-Tropez. Durante esos días se pudo ver a Carlota paseando por la localidad de la Costa Azul junto a una amiga con la que disfrutó de una tarde de compras y con la que comió helado. Parece ser que su estado le provoca refrescantes antojos a los que no quiere resistirse.  

   Las tensiones entre madre e hija que suscitó la noticia de la futura maternidad de Carlota se han disipado y ambas vuelven a estar muy unidas. Carolina no se tomó muy bien el hecho de que su hija de 27 años fuera a ser madre junto a un hombre de 42. Si bien, parece que el hecho de ser abuela por segunda vez ha borrado todos los malos pensamientos y ha acercado a ambas aún más.

   El romance entre la princesa y el actor no ha estado exento de contratiempos. Desde que fueron fotografiados juntos en Paris por primera vez surgieron los rumores de que Carolina de Mónaco no veía con buenos ojos la relación. Estos ganaron peso dado que madre e hija no aparecieron juntas en público durante varios meses.

   Afortunadamente, Carolina ha ido aceptando poco a poco a su yerno y ya el pasado verano Elmaleh acudía a pasar las vacaciones junto a los Casiraghi. A finales del pasado año, el actor disfrutó de la Navidad en el palacio de Mónaco y en el mes de marzo se le pudo ver completamente integrado en el tradicional Baile de la Rosa del principado, al que acudió junto a Carlota y al resto de la familia.

   La noticia del embarazo de Carlota supuso otro altibajo en la relación madre-hija pero pronto se ha superado y muestra de ello es la presencia, por segundo año consecutivo, del actor en las vacaciones familiares de Carolina.

   La princesa no ha podido reunir en esta ocasión a todos sus hijos como sí hizo el año pasado debido a que la familia está inmersa en la inminente boda de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo que se celebrará el próximo día 31 en el palacio de Mónaco.

   Para Carlota y Gad también han sonado campanas de boda, incluso se dijo que esta tendría lugar el próximo mes de septiembre. Si bien, parece que la joven ha decidido tomarse con calma el asunto del enlace y ahora, su principal preocupación es su futura maternidad, prevista para finales de año.

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