MADRID, 6 Jul. (CHANCE) -
Tras conocerse que su hijo Luis Medina se enfrenta a una pena de 9 años de cárcel por embolsarse presuntamente 1 millón de euros en comisiones, Naty Abascal reaparecía anoche en el Teatro Real acompañada por un amigo. Sin querer hacer ningún comentario al respecto, la Socialité se mostraba de lo más hermética y no confesaba cómo está viviendo estos duros momentos.
También se le preguntó si asistirá o no al enlace matrimonial del año, el de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, pero tampoco conseguimos una confirmación: "Buenas noches, gracias". Este jueves, las cámaras de Europa Press han sido testigos de cómo la modelo salía del Hotel Ritz donde se alojan todos los invitados de la boda y lo cierto es que hemos vuelto a intentar saber si acudirá o no.
Tan elegante como siempre, Naty no ha desvelado como cree que lucirán Isabel Preysler y su hija en el gran día ni si ella es una de las invitadas. Y es que la exmodelo es amiga de la madre de Tamara desde hace años, por lo que todo apunta a que podría estar en la lista de esta ceremonia.
La discreción ha sido la mejor aliada para Naty durante toda su vida y ahora sigue siendo su mejor arma, sobre todo cuando el caso de las mascarillas afectaba de lleno a su hijo y ocupaba los peores titulares en prensa. Tendremos que esperar a mañana para saber si la Socialité asiste o no a la gran boda del año.
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