MADRID, 28 Mar. (CHANCE) -
Ayer publicaba 'Vanitatis' que Isabel Pantoja podría estar negociando su vuelta a la televisión con una serie-documental como la de Rocío Carrasco... y lo cierto es que nos quedamos locamente sorprendidos porque como esto ocurra, sería un bombazo nacional y además, daría la vuelta al mundo entero porque ya sabemos que la tonadillera es conocida a nivel internacional y su vida siempre ha causado especial interés mediático.
Si Isabel Pantoja reapareciera públicamente con una serie-documental contando su verdad y declarándole la guerra a su hijo podrían pasar dos cosas. La primera de ellas sería hablar de su vida sin mencionar ningún aspecto negativo de su hijo o, en su defecto, morir matando.
Y 'morir matando' significa que echaría por tierra el testimonio de su hijo contando su verdad y poniendo por encima de todo y de todos a su querido hermano Agustín. Lo tendría un poco complicado, eso sí, ya que Kiko Rivera aportó pruebas de los tejemanejes de la herencia... aún así, nos encantaría verla frente a una cámara y oír su versión de los hechos...
La única diferencia entre Rocío Carrasco e Isabel Pantoja es que la hija de la más grande se ha llevado a la gente a su bolsillo porque ha contado un sufrimiento del que nunca se ha beneficiado porque lo ha llevado en silencio. La tonadillera sin embargo lleva toda la vida vendiendo penas: el triste fallecimiento de Paquirri, su paso por prisión, los testimonios de la familia Rivera contra ella... Nunca hemos visto a Pantoja vendiendo su felicidad y eso ha cansado a sus fans.
Los últimos testimonios, sobre todo el de Kiko Rivera, nos hacen ver a una persona ambiciosa, que solamente piensa en su propio bienestar por encima de todos los demás... una tristeza que nunca ha sido real y que si ahora llorase frente las cámaras, nadie compraría, porque es la misma pena que nos lleva vendiendo desde hace años y eso ya, señora Pantoja, no cuela.