Elena Benarroch: "Ver que tu país se va a la mierda es muy duro"

Posado de la diseñadora Elena Benarroch
JOSEFINA BLANCO/EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 7 junio 2012 13:43

MADRID, 7 Jun. (Por Alba G. Salas) -

La diseñadora asegura haber pasado cuatro años muy duros a vueltas con la crisis. Tuvo que abandonar una de sus tiendas en Madrid, pero ahora parece que ve la luz y afirma que los tiempos están mejorando.

Además, Elena Benarroch está muy contenta con el hecho de que su hija Yaël quiera seguir sus pasos en el mundo de la moda. Todo ello coincide con otra buena noticia, la sensible mejoría de Miguel Boyer que le alegra enormemente pues Elena es una de las fieles amigas de Isabel Preysler.

- Imagino que está usted muy orgullosa de su hija Jaël, ¿no?

- Mucho, siempre he estado muy orgullosa de mis hijos. Soy una madre absolutamente consciente de lo maravillosos que son mis hijos.

- Que ella siga tus pasos, ¿es un orgullo o una preocupación?

- Está muy bien. Es una pena que esto se pierda si yo dejo de moverme. Me gusta que ella esté aquí y mi otro hijo, desde Nueva York, también lo apoye y que siga, que esto siga, que nos ha costado mucho que esto llegue a donde ha llegado.

- ¿La crisis os ha afectado?

- Por supuesto, han sido cuatro años muy duros, pero creo que ya está acabando.

- Aún así tu clientela es muy fiel...

- Es muy fiel y muy múltiple. Son chinos, rusos, indios, al margen de los españoles, por lo cual, siempre me salvo desde ahí.

- ¿Has pasado malos momentos? ¿Creías que, al igual que les ha pasado a otros diseñadores, tendrías que abandonar?

- Sí, claro, he pasado momentos muy difíciles. Muy difíciles. Tuve que cambiar la tienda y dejar la de la calle Lagasca porque esa zona estaba muerta. Ver que tu país se va a la mierda es muy duro, pero creo que estamos saliendo.

- Aún así habéis apostado por el low cost para esta colección...

- Sí, pero porque esta colección está pensada para la exportación. Queremos que sea un producto 'made in Spain', que no pase de los 1.500 euros y que llegue a China, Rusia y a San Petersburgo, da igual. Lo importante es llegar a todos.

- ¿En qué os habéis inspirado para esta colección?

- En el caso Yaël, ella se inspira en la calle, actitud positiva, bicicleta, caminar hacia delante y tragarte el mundo. Así hay que ser a los 30 años.

- ¿Tú sigues teniendo ese espíritu?

- Tengo muchas ganas de seguir, por ahora, pero me gusta que ella esté detrás. Eso me va a permitir relajarme, porque tengo dos nietos de los que quiero disfrutar y todavía tengo muchos países que visitar. Tengo ganas de seguir, siempre, pero de hacer cosas más despacio y que ella esté con su producto en el taller, también.

- El hecho de que esté ella te da entonces la seguridad de que la firma Elena Benarroch seguirá y de que tú podrás despreocuparte un poco...

- Justo. Así yo podré estar un poco fuera de ello...

- ¿Necesitas un descanso y dedicar más tiempo a la familia?

- No, no, a la familia no. Necesito dedicar más tiempo a mis nietos. La familia no me ha importado nunca mucho, pero los dos niños me vuelven loca.

- ¿Eres una gran abuela?

- Soy como todas las abuelas, que creemos que nuestros nietos son los mejores del mundo.

- ¿Cómo ha sido trabajar codo con codo con tu hija? ¿Ha habido mucha lucha entre madre e hija?

- Es inevitable, somos dos personalidades muy fuertes y normalmente, ya una madre y una hija, chocan. Ambas metidas en un taller, imagínate, pero nos hemos respetado mucho los espacios y creo que ha salido bien.

- ¿Quién tiene más carácter de las dos?

- No sé qué decirte, antes igual te hubiese contestado que yo, pero ha sabido sacar bien los pies del plato, ¿eh?

- Hay muchas clientas amigas tuyas que se han acabado convirtiendo en grandes amigas...

- Muchísimas. Isabel Preysler o Sonsoles fueron clientas que entraron por la puerta y acabaron convirtiéndose en grandes amigas.

- Isabel no está aquí, ¿por qué no te ha acompañado?

- Está en Escocia, en una cosa con la reina de Inglaterra, o con el príncipe, no sé.

- ¿Qué tal está? ¿Cómo la ves?

- Está muy contenta porque Miguel está muy bien. Él tiene mucha fuerza y eso le ha hecho seguir adelante. Miguel afortunadamente está reaccionando bien, está saliendo adelante, y amigos como Felipe González sé que han estado ahí y le han ayudado mucho. Ver que están ahí gente a la que admira y a la que quiere, por supuesto que le estimula.

- ¿Tú le has visto?

- No, aún no. Pude hablar con él por teléfono y me alegré mucho porque comprobé que hablaba perfectamente.