Doña Letizia y la Infanta Elena, dos cuñadas muy confidentes

MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

Junto a los Príncipes de Asturias se encontraban ayer presidiendo la cena ofrecida a los miembros de la comisión de evaluación del Comité Olímpico Internacional (COI), la Reina doña Sofía y la Infanta Elena.

Antes de presidir la cena, los miembros de la Familia Real Española recibieron en el Salón de Columnas a los cerca de cien invitados, entre los que se encontraban, además de los miembros de la comisión y de la candidatura de Madrid 2020, una representación de las distintas administraciones, deportistas y miembros de familia olímpica y diversos ámbitos de la sociedad española. Entre los asistentes se encontraba la Infanta doña Pilar.

Los expertos del COI visitan Madrid estos días para examinar la candidatura de la ciudad para organizar los Juego Olímpicos de 2020. Asistieron en el Palacio Real a una velada en la que tanto la princesa Letizia como la infanta doña Elena llamaron la atención por su elegancia.

Doña Letizia lució para la ocasión un ajustado vestido verde de encaje que combinó con zapatos de tacón de color beige, y un pequeño clutch del mismo color que los tacones, con un detalle de pedrería a juego con el vestido. Su cuñada la Infanta doña Elena, escogió para la ocasión un modelito muy rojo, optó por vestido a juego con una chaqueta entallada roja. Para el calzado se decantó también por el color rojo, a demás de lucir un bolso 'Chanel' del mismo color que el resto del conjunto. Las cuñadas mostraron una gran complicidad entre ellas.

En su intervención, don Felipe puso de relieve que "Madrid es una ciudad no sólo europea, sino también un exponente indudable del amplio y pujante mundo hispánico e iberoamericano; la capital de un país que apuesta por la paz y la concordia y que se caracteriza además por una posición geoestratégica segura y accesible. Madrid ha sido perseverante, y con el tiempo ha mejorado aún más su candidatura, para conseguir ser sede de unos juegos olímpicos que tanto desea y por los que tanto está luchando. una muestra, en definitiva, de nuestro espíritu deportivo y olímpico, de que no nos rendimos y de que tenemos en la mayor estima el movimiento y la filosofía que están en la base de los juegos".