MADRID, 11 Nov. (CHANCE) -
La visita de uno de los nietos más cercanos al Rey Juan Carlos I ha marcado los últimos días en Galicia, coincidiendo con la publicación de las esperadas memorias del monarca. Aunque no existen imágenes de ambos juntos en Sanxenxo, Froilán fue captado en el aeropuerto de Vigo tras regresar de Abu Dabi y todo apunta a que quiso estar cerca de su abuelo en medio de este acontecimiento literario y familiar. La estancia del emérito en la casa de Pedro Campos durante las regatas ha aumentado la expectación que rodea a la familia en estos días clave.

La buena sintonía entre abuelo y nieto queda patente en las páginas del libro, donde Juan Carlos I revuelve emociones al compartir recuerdos tanto felices como difíciles. El Rey dedica un capítulo especial a este nieto, describiendo cómo han vivido juntos momentos de gran afinidad y apoyo, incluso reconociendo los desafíos y cambios de vida que ha afrontado tras mudarse a Abu Dabi. Una anécdota reveladora narra el empeño del joven en acompañar a su abuelo desde el desayuno, reflejando la cercanía y el compromiso que forman parte de su día a día.

De vuelta en Madrid, la actitud del joven ha cambiado notablemente: pasea por la ciudad relajado y sonriente, mostrando una actitud amable y receptiva ante los medios. Para muchos, esta tranquilidad es reflejo de la seguridad y el reconocimiento que le han brindado las palabras de su abuelo en este nuevo capítulo, marcado por la reconciliación y la valoración personal.