Descubrimos los mejores momentos de la segunda batalla de 'La Voz'

Actualizado: jueves, 30 marzo 2017 11:48

   MADRID, 3 Nov. (CHANCE) -

La segunda ronda de Las Batallas de La Voz será recordada, además de por los magníficos duetos que vimos en el ring, por la emoción desbordada para dos de los coaches. Anoche, en la segunda batalla, Manuel Carrasco y Melendi lo pasaron realmente mal a la hora de decidir quiénes de sus equipos continuaban en el talent show. "Me habéis hecho el hombre más feliz del mundo. Tenéis el talento y la cualidad más importante, la cualidad de vencer los miedos. La base del éxito no es solo el talento, es algo que se entrena. Hay que entender lo que es ser artista y vosotros lo habéis entendido y nos lo habéis hecho saber a todos", les dijo Melendi a Raúl y Job con los ojos llenos de lágrimas y mientras era consolado por su asesor, Diego Torres.

MANUEL CARRASCO, ROTO POR EL CORAZÓN DE CARLOTA

Arrastrado por las mismas emociones, Manuel Carrasco se mostró derrumbado en la batalla entre Nuria y Carlota, que hicieron una actuación muy pareja, cada una con su ukelele en mano. Pocas veces la situación en el ring se vive al contrario, es el concursante el que tiene que consolar a su coach. El artista onubense tuvo que tomar su decisión en base a pequeños detalles y eso le desmoronó. "Carlota es una tía increíble, con la edad que tiene, tiene una madurez y una alegría que se contagia y por eso mismo me ha tocado un poco el corazón", explicaba el artista sin poder contener las lágrimas. Pincha aquí para ver el vídeo.

TREVI, EN PANTUFLAS, SE DESMELENA, SE MOJA Y MOJA A MALÚ

Sin lugar a dudas, Gloria Trevi fue la asesora de la noche. La cantante mexicana dio muestras de su enorme desparpajo y brindó a los espectadores de La Voz algunos de los mejores momentos de la noche. Su estilo capilar no pasó desapercibido, con una versión más larga y cardada del peinado que caracterizó a la Duquesa de Alba, ¡qué en paz descanse! Sus pantunflas, que escondía tras el asiento de Manuel para los descansos, fueron al final sus compañeras en la fase final del espacio. Jesús Vázquez no podía quitarle los ojos a las babuchas rosas de la veterana artista, que terminó lanzando un vaso de agua al público, que cayó encima de una Malú ojiplática.

MELENDI Y SU CHAQUETA DE FLORES IMPOSIBLE

Si hablamos de estilismo, Melendi volvió a acaparar el protagonismo. Después de sorprendernos la semana pasada con un corte de pelo que le favorece, y mucho, José Mercé no pudo resistir la tentación de comentar la chaqueta blanca con estampado de flores negras por el que optaron los estilistas del ovetense: "Me encanta tu chaqueta, qué modosita, qué discreta... ojalá me la pudiera poner yo. Esa chaqueta no se puede aguantar", le dijo el maestro flamenco. "Yo te digo una cosa, el 'peinao' de Melendi fue el afro, ese le quedó precioso. Eso sí que era para cazarlo y no los Pokemon", apuntó un Alejandro Sanz muy bromista. "No puedo negar que he recibido muchos elogios y tampoco vamos a hacer oídos sordos a la gente. Si la gente dice que estoy muy bueno así..", zanjó el asturiano ante las risas de su asesor.

MALÚ Y LÁGRIMAS DE LOS HIJOS DE RAFA

Por activa y por pasiva, Malú siempre se ha quejado de esta fase del concurso. La cantante madrileña lo pasa realmente mal a la hora de tomar una decisión y eso que este año su asesor, Pablo López, le está echando buenos capotes. A la estrella musical le llegaron al alma las lágrimas de dos niños, los hijos de Rafael Bueno, uno de los concursantes del equipo de Sanz, que se batió en duelo flamenco con Carlos de Pepa, el elegido final. Malú se emocionó con Eloy y Marcos, los pequeños del conductor de autobuses y culpables de que su padre se lanzara a realizar su sueño. Y se hizo la magia. Malú hizo uso de su último robo y se desbordó la gratitud.

PARA CANTAR A SANZ HAY QUE SABER RESPIRAR

La batalla de Fran Doblas, el coplero andaluz, y Alejandro, el joven al que han encumbrado las redes sociales, no era fácil de partida. Interpretar Amiga mía, uno de los temas más emblemáticos de su coach, sin perder las respiración era muy complicado porque los tempos de los temas de nuestro artista más internacional son complicados. "Como no sepas respirar, es muy difícil cantar como mi compadre", decía Mercé en los vídeos que precedieron al duelo, que al final se llevó el exconcursante de Se llama Copa.

MELENDI, EL COACH BUEN SAMARITANO

Sin embargo, Melendi, obsesionado con los artistas emergentes que aportan algo distinto al panorama musical, no quiso que el joven se marchara de vacío del concurso.

"La semana que viene te coges un par de Aves y te vienes a mi estudio, tengo alguna canción ahí que te viene perfecta a ti", fue el ofrecimiento que le hizo el asturiano, un capote con el que se mostró muy agradecido y del que esperamos tener noticias en breve.

EDER, TELONERO DE ALEJANDRO

No fue el único ofrecimiento de la segunda batalla. A falta de robos, los coaches se vieron en la tesitura de despedir para siempre a muchas de las mejores voces que han pasado por el programa. Como Eder, que mantuvo una batalla muy igualada con uno de los potenciales ganadores del equipo de Sanz, Manu. "Ha estado muy reñido por lo que quiero decir antes de escoger a uno de ellos que ofrezco al descartado ser mi telonero en el concierto del día 5, que cante una o dos canciones antes", unas palabras que hicieron la marcha de Eder un tránsito mucho menos amargo del esperado.

LAS PULLISTAS CON EL INGLÉS DEL COMPADRE

También provocaron la sonrisa de los presentes y de la audiencia la enorme sintonía entre Sanz y su asesor. El madrileño se cachondea cada vez que podía del inglés del jerezano, que cada vez se atreve más a canturrear algunos de los temas elegidos para las batallas. "Van a canta everi dens y dú", les anunció a Manu y Eder, antes de canturrear al piano su propia versión anglosajona del éxito de Bryan Adams mientras esperaban la llegada de los dos contrincantes. La cara de Alejandro, un poema.

NOS MOJAMOS... ¡¡POR IRENE!!

Como colofón volvemos al principio y, como Trevi, nos mojamos. En esta segunda batalla ha quedado claro que hay una potencial ganadora, Irene, la tímida gallega que venció a Akuo, uno de los participantes con mejor actitud en el escenario. "Como meta toda a potencia que tiene, puede romper el programa", dijo Pablo López a las cámaras tras los ensayos. Un sentimiento que desde el otro lado compartimos: el ganador de La Voz de este año puede ser mujer...