GH17: Clara al Club y nomina directamente a Pol

   MADRID, 28 Oct. (CHANCE) -

   Noche de Halloween y de pactos en Gran hermano. Zepellin TV adelantaba la celebración de la velada más divertidas del reality al jueves, el mismo en el que arrancó la repesca. Día de expulsión con Rebeca como favorita a abandonar la casa y con un Alain con dos frentes abiertos: Adara y Bárbara. El francés se la jugó porque todo aquel que le cantó las cuarenta a las 'fuertes' en el pasado están lejos de Guadalix.

   Arrancó la noche de los muertos vivientes. Los cuatro expulsados, por primera vez en la historia del programa, entraron terroríficamente disfrazados sin saber que al final de la noche pasarían a convivir en el apartamento. Fernando, Montse, Candelas y Pablo se jugarán la repesca, un clásico del reality que se echaba en falta. Pero antes de ocupar la estancia paralela, a los habitantes les prepararon una noche terrorífica. Como dijo Jorge Javier Vázquez: "¡¡No sabían lo que les esperaba!!".

EL TÚNEL DEL TERROR ENTRE GRITOS, TARTAZOS Y PURÉ DE PATATA

   Los tres miembros de El Club: Miguel, Adara y Bea fueron los primeros en entrar en una casa repleta de payasos maléficos, zombies, personajes perversos... Candelas, vestida de camarero tétrico les llevó la cena; Fernando se encargaba de asustar a Adara, que se desagallitó de lo lindo. ¡¡Qué deleite para nuestros oídos!! A Miguel le esperó en la cocina un Pablo vampirizado. Por cierto, tiró del tupé del gallego y eso. Volvieron a subir los decíbelios con la entrada de Bea a la casa, y como se defendió la peluquera a la que contabilizamos 8 "cabrona". Montse le dio un tartazo a la pelirroja, que fue correspondido con la misma virulencia que el susto en la cocina que protagonizaron hace unas semanas.

CLARA EJERCE SU PODER COMO PRIVILEGIADA

   No hubo juego de las bolas, en su lugar bebieron brebaje de sangre que escondía un ojo que abrió la puerta de El Club a un nuevo miembro, Clara. La madrileña lo pasó de lo lindo en el trayecto, donde le esperaba Fernando, el pirata zombie, tarta en mano. Arrancaron entonces las nominaciones, que dieron un vuelco que señalaba directamente al hasta ahora intocable.

   La baguette de Pol está a punto de explotar, pero lo de la celotipia de la modelo es enfermiza. Adara ve enemigas donde no las hay, evidenciando los problemas de seguridad en sí misma que tiene la joven. En el lado contrario, Rodri y Bea. Él no quiere que sus compañeros les vean besarse, es más, hemos detectado alguna que otra semi cobra, pero eso no evita que el termómetro esté a punto de marcar récord.

   De todas, la mejor desgañitándose a Noelia, estuvo a la altura con creces. La habitante más friki de la edición estuvo al límite del colapso y nos brindó uno de los mejores momentos de la noche con El Súper pasándolo en grande desde el otro lado. A Bárbara le pudo el miedo y, por primera vez en el concurso, una concursante perdió la oportunidad de nominar. Pablo volvió a hacer lo que le dio la gana y se saltó las normas de El Súper, parece que le cuesta gestionar las órdenes o tiene problemas de memoria a corto plazo como Dori.

La expulsión de Rebecca estaba cantada como así fue. La casa no se mostró muy afectada por la marcha de la dependienta madrileña y ella fue franca con el maestro de ceremonias al echarle la culpa de su salida a su entrada un mes después de arrancar el programa. Para poco más le daba la entrevista, la única pega fue su conflicto con Meritxell a cuenta del musculado francés.

   Pol, Bárbara, Adara y Alain fueron advertidos de su nominación de esta semana. Mientras, los expulsados entraron en el apartamento perplejos por la sorpresa de la repesca. Siete días de convivencia con Candelas trastocada con la noticia. Su hermana se casa este sábado, ¿la dejarán salir de la casa? ¿Se llevarán el convite a la casa? El domingo continuará...