La determinación genética del sexo de las crías permitió a los reptiles colonizar los océanos ancestrales

Europa Press Ciencia
Actualizado: miércoles, 16 septiembre 2009 21:07

MADRID 16 Sep. (EUROPA PRESS) -

La determinación del sexo de las crías mediante los genes permitió a los reptiles marinos diversificarse y colonizar los océanos ancestrales, según sugiere un estudio de la Universidad de Harvard en Cambridge (Estados Unidos) que se publica en la revista 'Nature'.

Hace millones de años los reptiles marinos, extinguidos en la actualidad, daban a luz a sus crías y además el sexo de éstas estaba predeterminado genéticamente. Según señalan los investigadores, este tipo de determinación sexual precedió a la evolución del proceso de dar a luz y permitió a los reptiles adaptarse a la vida marina.

Las serpientes marinas son los únicos reptiles modernos que habitan el mar que tienen cromosomas sexuales para determinar el género de sus descendientes. Las tortugas marinas o los cocodrilos de agua salada tienen que ir a tierra a depositar sus huevos y la temperatura suele ser el factor determinante del sexo de sus crías.

Los científicos, dirigidos por Chris Organ, utilizaron un análisis filogenético para predecir el mecanismo de determinación sexual en tres reptiles marinos del Mesozoico ya extinguidos: mosasaurios, sauropterigios e ictiosaurios. Cada reptil era de un linaje evolutivo diferente, aunque a partir de las evidencias fósiles todos habían desarrollado el proceso de dar a luz frente al de poner huevos.

Los investigadores descubrieron que cada uno de los tres reptiles desarrolló una determinación sexual genotípica antes de la capacidad de dar a luz. Como explican los científicos, tal determinación de género es una ventaja porque equilibra la tasa de nacimientos de machos y hembras en la especie y promueve su supervivencia a partir de las fluctuaciones ambientales.

Según explica Chris Organ, "la determinación del sexo con mecanismos genéticos permitió a los reptiles marinos dar a luz en el agua en vez de poner huevos en un nido en la playa. Esto liberó a estas especies de la necesidad de trasladarse y anidar en tierra. Como consecuencia, se desarrollaron adaptaciones físicas extremas en cada grupo como colas, aletas dorsales y los miembros similares a alas del ictiosauro".

Los mosasauros, sauropterigios e ictiosaurios invadieron los mares mesozoicos hace entre 251 y 100 millones de años. Estos tres grupos de reptiles marinos extinguidos respiraban aire pero desarrollaron otras adaptaciones para vivir en el océano como miembros con forma de aleta, cuerpos estilizados y cambios en su estructura ósea. Algunos se convirtieron en depredadores enormes como el ictiosauro similar a una marsopa que llegaba a alcanzar los 20 metros de longitud.

Contenido patrocinado