Si quieres que tu casa sea un auténtico remanso de paz y comodidad, sigue estos consejos.
Madrid, 17 de Octubre de 2017.- Nuestro hogar es nuestro santuario, el lugar al que cada día volvemos tras una jornada ajetreada, el sitio donde descansamos, vivimos y disfrutamos de esos ratos en los que queremos que las obligaciones sean la última de nuestras preocupaciones. Es un sitio extremadamente importante, y por eso, asegurarse de que está cuidado y goza de las condiciones más adecuadas es primordial.
Si quieres estar a gusto en tu casa, debes asegurarte de que en el interior haya una temperatura y un nivel de sonido que aporten bienestar. De nada te sirve tratar de desconectar de todo si estás escuchando ruidos de la calle por culpa del tráfico o de una ambulancia, como tampoco asfixiarte por el calor de fuera o morirte de frío por culpa de las bajas temperaturas. Todo esto puede evitarse para mejorar tu estancia en tu propio hogar, y para ello solo hay que asegurarse de cumplir una serie de pasos.
Puede que necesites hacer obras, o puede que solo tengas que hacer unas pequeñas modificaciones; pero si haces caso a estas 4 claves que te vamos a contar, no vas a tener que preocuparte ni por temperaturas ni por sonidos. Vas a tener un remanso de paz y bienestar al que llamar casa y del que disfrutar mientras te tiras en el sofá, te echas en la cama o simplemente ves la televisión.
Paredes
Hay muchos tipos de paredes y fachadas con los que revestir tu casa. Elegir los materiales y el diseño adecuados es fundamental para que ni el ruido del exterior ni las temperaturas penetren en tu hogar. Una pared mal planteada puede ser casi como una puerta abierta de cara a todos estos agentes externos.
Si tienes opción de elegir, apuesta siempre por una fachada ventilada. La cerámica Frontek es una de las mejores apuestas en este sentido. Su ligereza, resistencia, durabilidad, dureza y baja absorción del agua la convierten en un revestimiento ideal para las paredes exteriores de una casa. Su instalación es tremendamente sencilla, gracias a un sistema de anclaje a partir de estructuras metálicas y a no requerir ni cortes ni perforaciones para su montaje. Este cúmulo hace que su resistencia sea aún mayor y refuerce su función.
Suelos
¿Te imaginas poder andar descalzo sin preocuparte de que sea verano o invierno?, ¿hacerlo además con la total seguridad de caminar sobre una superficie totalmente pulida y limpia? Para mezclar ambas cosas, lo mejor es optar por suelos porcelanicos. Es cierto que requieren de un mayor cuidado dado lo fácil que es notar imperfecciones en ellos, pero sus capacidades aislantes e incluso a nivel sanitario son altamente favorables a la comodidad del habitante.
Puedes encontrarlos pulidos, simulando texturas y hasta con efecto madera. Cada una de estas vertientes cuenta con propiedades distintas, pero todas tienen en común el aislamiento térmico y la limpieza; el resto recae sobre todo en el gusto por la estética de quien quiera instalar un suelo de este tipo.
Techos
Seguramente no lo sepas, pero la mayoría del calor perdido en una vivienda es a través de su techo. Para evitar esta fuga térmica lo mejor es instalar un aislante adecuado en el tejado y evitar cualquier oquedad o vía de escape, así como las peligrosas humedades y la penetración de ruidos del exterior.
Una buena instalación y un buen material apenas requieren mantenimiento. El consumidor puede emplearlos y dejarlos listos durante una buena temporada sin tener que preocuparse por su estado. Dadas sus características, están preparados para aguantar las inclemencias de la meteorología, salvo casos extremos evidentemente.
Ventanas
Es el último punto, pero para nada el menos importante. De nada te sirve reforzar los demás aspectos de tu casa si no eres capaz de contar con unas buenas ventanas que rematen todo el conjunto. Hay que tener en cuenta que son la capa que separa el interior del exterior y que tapan algo que, de otra forma, sería un gran agujero en nuestras paredes.
De cristal doble, con marcos de aluminio y con cierres seguros. En cuanto las instalas, o cambias las anteriores por unas más modernas y mejor preparadas, notas los cambios ipso facto. Los ruidos se reducen casi al mínimo, y tanto la entrada de temperatura externa como la fuga de interna se evitan por completo.
No es un plan que se pueda llevar a cabo a corto plazo, pero conviene tenerlo muy en cuenta si se quiere disfrutar por completo de las comodidades que te puede brindar un hogar bien equipado y preparado. Muchos subestiman la importancia de las instalaciones, y a la larga deben retractarse para mover ficha y apostar, como recomendamos, por un buen aislamiento que mejore la calidad de vida en casa.
Autor: Pedro Fernández
Empresa: OlimpoMarketing
Andalucía
