Comos dice que el Ebro "ha tirado" en 2008 al mar "35.000 empleos que se crearían con la ejecución del trasvase"

CASTELLÓN 30 Ene. (EUROPA PRESS) -

El director de la Fundación Agua y Progreso de la Comunitat Valenciana, José Alberto Comos, afirmó hoy que "en 2008, el Ebro ha tirado al mar 35.000 empleos", en referencia "a los más de 35.000 puestos de trabajo que se crearían sólo por la ejecución de la conducción y a los otros 150.000 empleos cuya destrucción se evitaría con la construcción del trasvase del Ebro a la Comunitat Valenciana, Murcia y Almería".

Comos realizó estas declaraciones durante la visita a la desembocadura del Ebro que efectuó junto a los alumnos de la Universidad Jaume I de Castellón (UJI) que participan en el curso de Climatología 2008-2009, para observar 'in situ' el caudal de la gran cuenca excedentaria del Mediterráneo español y comprobar cuánta agua va al mar por encima de los caudales ecológicos, según informaron en un comunicado fuentes de la Fundación Agua y Progreso.

Al respecto, José Alberto Comos destacó que el trasvase del Ebro podría representar "ese rayo de esperanza que todos necesitamos", y es que -dijo- "la conducción hídrica a la Comunitat Valenciana, Murcia y Almería, además de proporcionar el agua que tanto necesitamos, crearía al menos 35.000 empleos y evitaría la destrucción de otros 150.000 puestos de trabajo".

"Esto es así, porque la construcción del trasvase del Ebro permitiría la creación de una cantidad muy importante de puestos de trabajo en la cuenca mediterránea, relacionados directa o indirectamente con la conducción hídrica", apuntó Comos, quien destacó que "lo que es todavía más importante en los tiempos que corren, evitaría que otros 150.000 empleos que ya están creados se destruyan, al posibilitar la consolidación de los mismos".

El responsable de la Fundación Agua y Progreso realizó esta apreciación basándose en los estudios del profesor Joaquín Melgarejo, profesor de Economía Aplicada de la Universidad de Alicante, y en los propios documentos recogidos en el volumen económico del PHN de 2001, que contenía el trasvase del Ebro.

En este sentido, manifestó que gran parte del empleo que se vería beneficiado de la llegada del agua del Ebro "está en la agricultura y relacionado con la mejora del regadío, unas 150.000 hectárea". Del mismo modo, --dijo-- "el trasvase conllevaría la creación de 20.000 puestos de trabajo en el sector de la construcción, así como otros 15.000 en infraestructuras de ocio y turismo, mientras que en materia de abastecimientos se verían beneficiados unos 15.000 puestos de trabajo en Cataluña, 9.000 en la Comunitat Valenciana y otros 5.000 en Murcia".

Por su parte, el catedrático de Análisis Geográfico y director del Laboratorio de Climatología de la UJI, José Quereda, explicó a los alumnos de Ingeniería Técnica Agrícola que participan en el curso de Climatología y que han realizado este estudio a lo largo del curso inferior del río Ebro, entre el azud de Xerta y canal de Xerta-Càlig hasta la desembocadura en el Faro de la isla de Buda, las características del ciclo hidrológico, la evapotranspiración y escorrentía de este tramo del río Ebro.

Quereda indicó que el canal de Xerta "lleva a los arrozales del Delta del Ebro unos 1.000 hectómetros cúbicos de agua al año, cantidad similar a la que reclaman las tres comunidades afectadas", y mostró a los alumnos la "gran lengua de agua que se tira al mar". Al respecto, recordó que, a partir del Azud de Xerta, "ya no hay usuarios del Ebro", por lo que "toda el agua que baja desde este punto se tira al mar sin que nadie la pueda aprovechar".

El catedrático de Análisis Geográfico de la UJI también se refirió a los informes que aseveran que "el río Ebro dispone de caudal suficiente para realizar la transferencia a la Comunitat Valenciana, Murcia y Almería, incluso en períodos de extrema sequía, en cuyo caso la conducción sólo supondría el 14,30 por ciento del total anual de su caudal".