Cultura.- Cultura recupera los murales de la iglesia de Santa María del Mar del Grao de Valencia de Juan Bautista Bayuco

VALENCIA 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Dirección General de Patrimonio Cultural Valenciano ha recuperado una de las dos únicas obras atribuidas al pintor Juan Bautista Bayuco, las pinturas murales de la Iglesia de Santa María del Mar del Grao de Valencia. Las obras están fechadas en 1702 y pertenecen al período Barroco valenciano, ya que beben directamente de las técnicas de Antonio Palomino, máximo representante de esta sensibilidad estética, informaron hoy fuentes de la Conselleria de Cultura.

La directora general de Patrimonio Cultural Valenciano, Paz Olmos, visitó hoy este edificio y destacó el valor de la intervención en la visita a las obras de restauración "la importancia de estas pinturas radica en que es una de las dos obras conocidas que se conservan de Bayuco, quien tuvo mucha actividad en Valencia y cuyas obras se han perdido a excepción de un cuadro que se conserva en el Convento de San Martín de Segorbe".

La aportación del departamento que dirige Olmos constituye el 77% del presupuesto y está cifrada en 15.384 euros. El coste total de la intervención alcanza los 20.024 euros, detallaron las mismas fuentes.

Juan Bautista Bayuco es un autor prácticamente olvidado por la historiografía que desarrolló su actividad entre 1963 y 1705. Las pinturas murales de Santa María del Mar se convierten en la última obra conocida de este artista antes de su fallecimiento. Entre los motivos de su desconocimiento destacan el hecho de que apenas se conserva obra suya y de que el trasagrario ahora rehabilitado ha tenido un uso de despacho o archivo.

Esta intervención ha servido, además, para aprovechar la proximidad a la firma y reconocerla perfectamente, por lo que esta obra despierta un alto interés historiográfico por ser la única pintura mural documentada y firmada de Bayuco.

Las pinturas murales se hallan en una capilla decorada en su totalidad --desde el suelo hasta el punto máximo de la cúpula-- con pintura mural a seco sobre mortero tradicional de cal y arena. En su iconografía aparecen las tres virtudes teologales, Fe, Esperanza, y Caridad; la Revelación, la Doctrina y la Trinidad. Completan la decoración cornucopias, jarras, lazos y guirnaldas de flores y frutas.

El interés arquitectónico de la capilla radica en que es una pervivencia singular y única del templo construido en 1600, ya que el actual es un nuevo templo que se construyó un siglo después. Los trasagrarios son piezas características y privativas de la arquitectura barroca valenciana cuya finalidad era la de servir de reposador donde custodiar la Eucaristía cuando esta no recibía culto público.

Para recuperar las pinturas se han acometido diversos procesos, que han consistido en una limpieza de la capa pictórica, eliminación de sales, consolidación de la capa de pintura y reintegración de las pérdidas, todo ello acompañado de una minuciosa documentación de las actuaciones.

Además de estas intervenciones, se han destapado las ventanas que permanecían cerradas y se va a renovar la instalación eléctrica. "Con estas iniciativas, las pinturas murales volverán a tener el esplendor con el que fueron concebidas al estar totalmente restauradas y disponer de una iluminación más adecuada para poder apreciarlas", señaló Paz Olmos.

Debido al elevado estado de deterioro, se ha dividido la intervención en dos fases. La primera contempla la restauración de la zona de la cornisa hacia arriba, donde se hallan las pinturas de la cúpula, del tambor y de las pechinas. La segunda contempla la restauración de la zona de cornisa hacia abajo, formada por las pinturas de los paramentos, pilastras, puertas y arco.

La iglesia de Santa María del Mar del Grao tiene un origen gótico, ya que se halla documentada desde 1333, aunque en el siglo XVII se decide la construcción de un nuevo templo donde hoy en día se halla el altar mayor.

TIPO VALENCIANO

El templo de Santa María del Mar responde al tipo valenciano de origen gótico, con nave única y capillas entre contrafuertes comunicadas por pequeños pasos a través de aquellos. Al ser de época barroca, la bóveda es de medio cañón con lunetos, y la cúpula, con teja azul, se levanta en el crucero sobre un estrecho tambor. Las dos portadas son tardobarrocas.

La lateral, con hornacina donde aparece la Cruz y la escalera que representan esta iglesia y que, además, simbolizan la llegada por mar del Santo Cristo; y lápida con el nombre 'Santa Maria del Grao 1940', fecha de su restauración. La otra puerta, próxima a las Atarazanas, es de ladrillo, que se advierte bajo el revestimiento, y ostenta una hornacina con la imagen sedente de Nuestra Señora de la Luz de 1943. En la capilla de la comunión hay una valiosa talla del siglo XVI.