CASTELLÓN, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
La directora general de Patrimonio Cultural Valenciano, Paz Olmos, realizó hoy una visita a la localidad de Vilafamés, durante la que se presentaron las últimas intervenciones de la Conselleria de Cultura en la citada localidad, donde ésta ha invertido 320.000 euros en la restauración de la Iglesia de la Sangre, según informaron en un comunicado fuentes del Consell.
El interesante núcleo antiguo de Vilafamés está declarado Bien de Interés Cultural desde el año 2005. Del conjunto destacan, además de muchos otros elementos arquitectónicos como las murallas o la ermita de san Ramón, la iglesia parroquial de la Asunción y la iglesia de la Sangre.
A esta última acudió la directora general para la presentación de la reciente restauración de parte de las pinturas murales que adornan el templo. La inversión global de la Conselleria de Cultura en esta iglesia asciende a 320.000 euros, centrada principalmente en la renovación de las cubiertas y la consolidación de las fábricas. A estas inversiones hay que añadir los 76.400 euros de presupuesto de esta última intervención en los murales, que ha sido cofinanciada con la Diputación de Castellón.
Durante la restauración de dos de las capillas de la Iglesia de la Sangre se encontró, en el muro del presbiterio, indicios de restos de pintura mural gótica con formas humanas. A la vista de esto, se realizaron catas para eliminar el enlucido superpuesto, incluso se eliminó un tabique de la decoración barroca que formaba una cámara con el muro.
Se descubrió entonces que era una pintura mural con arquitectura de retablo pintado, con las escenas separadas con decoración geométrica y rematadas por la parte superior con arcos de tipología gótica, y por la parte inferior de las escenas con suelo en damero en ocre, almagra y negro. Las figuras humanas que componen estas escenas son esquemáticas y con aureola.
La iglesia de la Sangre, que está declarada Bien de Relevancia Local, conserva en su interior un importante conjunto de retablos, formado por los retablos de Santa Bárbara, San Cristóbal y la Dolorosa, que han sido restaurados por el Instituto Valenciano de Restauración y Conservación y que actualmente están pendientes de su colocación en el templo, una vez se finalice la adecuación interior del mismo.
Se trata de una construcción de origen medieval, que forma parte integrante de la fortificación del castillo, y que fue barroquizada en el siglo XVII. Entre los elementos ornamentales, destaca la decoración pictórica al fresco del presbiterio típica del barroco ilusionista, con motivos relativos a la pasión. Decoración que se relaciona con el círculo artístico de la familia de los Guilló Barceló.
El retablo mayor data de 1697. Destaca así mismo el retablo de la capilla de Santa Bárbara, original pieza del barroco, y el zócalo de cerámica valenciana del siglo XVIII. La directora general visitó también la sala Quatrecantons, que anteriormente fue Museo del Vino y más tarde sala de exposiciones. urante este periodo pasaron por ella importantes artistas como Valdés, Boix, Heras, Michavila, entre otros.
Así mismo, Olmos visitó el Museo de Arte Contemporáneo, fundado y dirigido por el crítico de arte Vicente Aguilera Cerni en 1970. Se halla instalado en la llamada Casa del Batle, amplio palacio del gótico civil del siglo XV. Para su funcionamiento, este museo ha recibido 50.000 euros de subvención por parte de la Dirección General de Patrimonio Cultural Valenciano, según las mismas fuentes.
