Cultura.- El IVAC cierra el ciclo de documental austríaco con 'El paraíso de Hafner' de Günter Schwaiger

Europa Press C. Valenciana
Actualizado: miércoles, 30 abril 2008 17:29

VALENCIA 30 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Institut Valencià de Cinematografia Ricardo Muñoz Suay (IVAC)-La Filmoteca presentará el próximo viernes, 2 de mayo, la película hispano-austriaca 'El paraíso de Hafner', de Günter Schwaiger, como clausura del ciclo dedicado al mejor documental austríaco contemporáneo. Esta serie de proyecciones, qu se inició el 18 de abril, con la colaboración del Foro Cultural de Austria, consta de una selección de ocho documentales producidos en Austria en los últimos años, informaron hoy fuentes de la Conselleria de Cultura.

Este grupo de películas, como en general el documental contemporáneo, se caracteriza por su heterogeneidad, tanto en lo relacionado con los discursos que construye cada una de las películas, como con los materiales utilizados para ello o los temas tratados por las mismas, en los que no obstante se observan algunas constantes, explicaron las mismas fuentes.

Por un lado, la reflexión y recuperación de la memoria histórica en torno a los oscuros regímenes fascistas en Europa es el eje central de dos de las obras que aún se podrán ver entre el viernes y el lunes --'The End of Neubacher Project' y 'El paraíso de Hafner'--. Esta última indaga en los presentes discursos de miembros activos de la barbarie nazi, mientras que 'The End of Neubacher Project', fusionando memoria privada y memoria histórica en un proyecto en el que el propio director se enfrenta a los fantasmas de su familia nazi.

En esta línea, 'Exile Family Movie' es otro ejemplo de esa tendencia autobiográfica de la no ficción en la que el autor y su entorno más cercano se erigen en el objeto central del film, convirtiéndolo en una especie de álbum de familia. Sin embargo, mientras 'Exile Family Movie' se limita a recoger un encuentro puntual entre los numerosos miembros de una familia iraní y centrarse sobre todo en las huellas que el exilio deja en ellos, 'The End of the Neubacher Project' es una "home movie épica" que se extiende a lo largo de siete años durante los que Carney intenta vencer la resistencia de su familia, y en especial su madre, para enfrentarse al pasado.

'BOOM' ASIÁTICO

Además, entre el 4 y el 26 de mayo La Filmoteca se aproximará a algunos autores y películas imprescindibles del último cine asiático e incluye muestras de los diferentes países implicados en el boom que desde hace algún tiempo vive el cine producido en Extremo Oriente. El IVAC-La Filmoteca presenta este ciclo en colaboración con el Festival de Cine Asiático de Barcelona (BAFF) y el CGAI.

De China llega 'Los demonios en mi puerta' (2000), ganadora del Gran Premio del Jurado del Festival de Cannes de ese año. Ésta es una de esas películas que permanecen en la retina aún cuando las luces de la sala se encienden. Rodada en un sobrio y perfecto blanco y negro, la película, que combina a la perfección el drama bélico con la comedia, provocó el enfado de las autoridades chinas, que la prohibieron acusándola de antipatriótica. Su director, el famoso actor Jiang Wen, fue sancionando con la prohibición de actuar y dirigir en China durante un período de dos años.

Su compatriota Yu Lik-wai es uno de los directores de fotografía más destacados del cine independiente chino (suya es, por ejemplo, la fotografía de algunas de las películas de Jia Zhangke) y dirigió en 'Hong Kong Love will tear us apart' (1999), interesándose por la vida de los emigrantes de la República de China a la nueva "región administrativa" de Hong Kong.

Por su lado, Japón ha producido obras tan interesantes como 'All About Lily Chou-Chou'. Shunji Iwai la dirigió en 2001, convirtiéndose automáticamente en un director de culto y en cronista oficial de la desazón adolescente. 'El sabor del té' (Katsuhito Ishii, 2003) homenajea al cine costumbrista clásico japonés, centrado en historias mínimas de la vida cotidiana y familiar, en especial el de Ozu, pero con la particularidad de introducir unos personajes excéntricos bajo la apariencia cotidiana de la narración.

La representación nipona se cierra con 'It's only talk', ganadora del premio del público y de una mención del jurado en el BAFF 2006, filme que pone de manifiesto la capacidad de Ryuichi Hiroki para retratar la sensibilidad del alma femenina.

La cinematografía taiwanesa está representada en el ciclo por tres de sus cineastas más prestigiosos, como son Edward Yang, Hou Hsiao-hsien y Tsai Ming-Liang. El primero ganó en Cannes el premio al mejor director en 2000 por 'Yi Yi', con la que, en palabras de Yang, "quería crear una obra sin disfraces, casi sin estilo ni maquillaje, privilegiar un enfoque frontal de la vida, reflejado hasta en los nombres".

En 'Millenium Mambo '(2001), Hou Hsiao-hsien construye una historia de amor y desamor entre dos jóvenes que deambulan sin rumbo a través de un universo cerrado y nocturno, que se convierte en una aguda mirada sobre los cambios del Taiwán contemporáneo, cada vez más alejado de la tradición. Por otra parte, un viejo cine a punto de despedirse de su público y una antigua película de artes marciales son los protagonistas mudos de 'Goodbye, Dragon Inn' (Tsai Ming-liang, 2003), un filme que es una mirada nostálgica a tiempos pasados.

Durante los últimos años, Corea del Sur se ha convertido en todo un filón cinematográfico, gracias a la obra de, entre otros, Bong Joon-ho, Park Chan-wook, Hong Sang-soo, Kim Ki-duk o Lee Chang-dong. Oasis, dirigida por este último, recibió en el BAFF 2003 el premio del público, que demostró una gran empatía con los protagonistas de esta esquinada historia de amor entre dos personajes marginales.

Por último, no podía faltar en esta selección uno de los cineastas más aclamados por la crítica internacional debido al radicalismo de su obra. Se trata del tailandés Apichatpong Weerasethakul, cuyo último largometraje, 'Syndromes and a Century', es una obra "abstracta y emocionante a partes iguales, misteriosa y fascinante, que, como ya va siendo habitual en la obra de Weerasethakul, plantea un juego de simetrías y yuxtaposiciones alrededor de la historia que cuenta cómo se conocieron sus padres", concluyeron desde el IVAC.

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