VALENCIA, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de Patrimonio Cultural Valenciano ha recuperado las pinturas murales de la Iglesia de San Joaquín de las Escuelas Pías de Valencia. Se trata de dos conjuntos, uno atribuido a José Vergara y otro de autor desconocido. La aportación del departamento ha sido de 15.384,61 euros, que se han completado con la aportación de las Escuelas Pías hasta alcanzar un importe de 22.277 euros, informaron hoy fuentes de la Conselleria de Cultura.
La directora general de Patrimonio Cultural Valenciano, Paz Olmos, visitó hoy los trabajos y expresó su deseo de que se sucedan otras fases de recuperación. "Esperamos que podamos proseguir con la restauración en próximas convocatorias de estas mismas ayudas", dijo la directora general, que subrayó que Vergara es, "sin lugar a dudas, uno de los fresquistas más importantes de la pintura valenciana y su producción fue abundante, ya que dejó obras en la mayoría de iglesias y conventos no sólo de Valencia, sino también de Alicante y Castellón".
Las pinturas firmadas por Vergara se hallan en la parte central del Altar Mayor sobre la bóveda de cuarto de esfera. Se trata de una obra de gran maestría y constituye un conjunto de los más sobresalientes del autor en Valencia. Esta pintura es la expresión gráfica de la misión de San José de Calasanz, llamado a recoger niños huérfanos y pobres y fundador de las Escuelas Pías, en presencia de la Virgen María, a partir de lo cual es considerado como precursor de la pedagogía moderna.
Respecto a las pinturas del tambor de la cúpula, se trata de 20 paneles idénticos de forma rectangular con carácter ornamental que representan la custodia con la forma consagrada rodeada de motivos vegetales y rocalla. De momento, se desconoce el autor, pero se puede saber que participaron varios pintores por la diversidad de trazos.
José Vergara (1726-1799) perteneció a una de las sagas artísticas más importantes del momento. Hijo y hermano de escultores, fundó la Academia de Santa Bárbara, precursora de la actual de San Carlos. Vergara destacó primordialmente como fresquista y su estilo es claramente academicista con influencias napolitanas por un lado, y de Juan de Juanes y Ribalta por otro.
Vergara pintó numerosas obras repartidas por iglesias y conventos no sólo de la Comunitat Valenciana, sino también de Cataluña y Baleares.
LA INTERVENCIÓN
La intervención que se ha realizado era muy esperada, ya que las actuaciones se han ido postergando por el elevado coste. Entre los problemas que presentaban las pinturas destacan la presencia de humedad, de grietas, de suciedad, de sales y la existencia de faltantes de pintura.
La actuación consiste en la consolidación de las capas pictóricas, el sellado de grietas, la eliminación de elementos ajenos, una limpieza, la reintegración matérica y cromática, y una protección final en el caso del conjunto anónimo.
Los criterios seguidos en la intervención han sido la fidelidad al original, la reversibilidad de los materiales empleados, la durabilidad de actuación, la documentación exhaustiva de los procesos, la mínima intervención y la legilidad del conjunto.
La iglesia de San Joaquín es un templo anexo al Convento y Real Colegio de las Escuelas Pías de Valencia, situado en el barrio de Velluters y declarado Monumento Histórico- Artístico Nacional en 1982.
Fue construida entre 1767 y 1771 y es obra del arquitecto Antonio Gilabert, autor también de otros edificios de gran importancia arquitectónica como la Capilla de San Sebastián de la Catedral de Valencia o el Palacio de Justicia de la ciudad. Se trata de un claro ejemplo de la arquitectura neoclásica academicista valenciana. Es de planta circular y el espacio queda cerrado por una colosal cúpula que figura como la tercera más grande de Europa.
Este templo ha sido parangonado en numerosas ocasiones con el Panteón de Roma debido a la configuración circular de su espacio interior y a su carácter de mausoleo, ya que fue concebido para albergar los restos mortales de los escolapios más ilustres.