VALNCIA, 25 May. (EUROPA PRESS) -
El decreto ley de medidas urgentes en respuesta a la emergencia económica y energética originada por la guerra de Ucrania, conocido como "decreto ómnibus", encara su convalidación en el pleno de Les Corts con el previsible voto a favor de los tres partidos del Botnic, pero queda en el aire si tendrá continuidad como proyecto de ley, como pedirá la oposición.
El decreto ley se aprobó el pasado 22 de abril y entró en vigor desde su publicación en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana. Este jueves se vota su convalidación: en caso de aprobarse, las medidas que se incluyen en él continuarían en vigor.
Si se decide tramitar como proyecto de ley, se abriría un proceso legislativo a partir del texto del decreto (que continuaría en vigor). De aprobarse esa ley, se modificaría el decreto, pero en caso de no salir adelante la norma, el decreto continuaría vigente.
"Queda mucho tiempo, 24 horas parece poco, pero dan para mucho", ha afirmado la portavoz adjunta de Unides Podem, Estefanía Blanes. Y es que las negociaciones continúan en el Botnic para ver la continuidad que puede o no tener este decreto. "Ya sabéis que en el Botnic somos expertas en acordar in extremis", ha agregado la síndica de Compromís, Papi Robles.
En estos momentos, el PSPV votará a favor del decreto y en contra de tramitarlo como proyecto de ley; el PP, Cs y Vox se opondrán al decreto pero propondrán que se debata como proyecto de ley. Compromís apuesta por convalidar el decreto y luego darle continuidad con una ley de soberanía energética diferenciada de este proyecto.
El voto que queda en el aire es el de Unides Podem, que admite que votar a favor del decreto pero luego tramitarlo como proyecto de ley o como otra ley como propone Compromís es una opción "como tantas otras". Así, Blanes ha remarcado que están "totalmente a favor de la ampliación de las instalaciones de energías renovables", pero se ha preguntado cuál es la "posibilidad, espacio o herramienta mejor" para incluir sus reivindicaciones.
La portavoz adjunta también ha valorado que se puede llegar a acuerdos en otras leyes, proyectos o tramitaciones, como sería incluir alguna de sus reivindicaciones en la ley de acompañamiento.
Así, ha defendido que hay que reforzar la autonomía municipal porque la capacidad de decisión está "bastante mermada"; así como reforzar la protección del territorio, porque que sean energías renovables "no significa que sean inocuas". Asimismo, ha reclamado trabajar en potenciar el autoconsumo y las cooperativas en contra de las macroplantas.
Además, ha advertido de que hay que evitar que las normas para agilizar trámites deriven en "una falta de control " y supongan "un riesgo de especulación y de saturación a la Administración". Por todo ello,
PSPV Y COMPROMÍS
Durante el pleno, el portavoz del PSPV, José Muñoz, ha pedido la convalidación del decreto porque es "la gran oportunidad valenciana para ponerse la frente de las economías y regiones europeas" o, en caso contrario, supondrá "delimitar el futuro de los valencianos".
Muñoz ha destacado que el decreto incluye medidas estructurales y también palia los problemas coyunturales. Así, ha destacado que frente a las apuesta de la derecha por bajar impuestos y con el consiguiente "recorte de derechos" este decreto habilita "un sistema de ayudas eficaces para quien lo más lo necesitan". "No desaprovechemos la oportunidad del futuro", ha rogado a los grupos.
En pasillos, la síndica socialista, Ana Barceló, ha indicado que el president, Ximo Puig, planteó hace unas semanas un pacto por la energía a todos los grupos y ha apuntado que "el punto de partida es bueno" porque "no se discute la necesidad de agilizar toda la tramitación para conseguir cuanto antes la autosuficiencia".
Por parte de Compromís, la síndica ha remarcado que "no hay que donar una respuesta de urgencia solo sino estructural" y que detalle cómo se va a distribuir la energía, cómo se va a comercializar y cómo va a llegar a las familias.
Por ello, ha abogado por plantear una ley de soberanía energética en la que se marque "toda la estructura" de la producción y distribución en la Comunitat Valenciana y "actuar de una manera constructiva". Por ello ha pedido que esta ley se tramite en un "plazo corto".
OPOSICIÓN
El portavoz de Hacienda del PP, Rubén Ibáñez, ha señalado que este
decreto es "la constatación de un Gobierno en descomposición, sin pulso, sin empatía social ni soluciones" y ha refutado que contenga grandes ayudas porque "no hay ayudas".
Así, ha señalado que "es una huida hacia delante de un Consell en un tiempo de descuento" lleno de "apariencias y ocurrencias" y "una barbaridad normativa que recurre a una aparente y extraordinaria necesidad para hacerlo con la mayor rapidez con el fin de tapar el mayor ridículo en la historia con el decreto 1 que nunca se llegó a publicar por los reparos de la Abogacía". "Es la II parte de una gran chapuza, llena de vulneraciones normativas y de respuestas ineficaces".
Mientras, la síndica de Ciudadanos, Ruth Merino, ha señalado que "el tripartito ha convertido el decreto de las energías renovables en un cajón de sastre donde todo vale para colar medidas partidistas que no tienen que ver exclusivamente con las soluciones que necesitan los valencianos para hacer frente a la crisis energética".
Por ello, ha propuesto que se tramite como proyecto de ley porque "tiene margen de mejora y el decreto, tal como lo han presentado, deja mucho que desear", por lo que espera que "sí solucione el déficit energético y que evite que las instalaciones de energías renovables se vayan a otros territorios" en detrimento de la Comunitat Valenciana.
Desde Vox, el portavoz adjunto José María Llanos ha criticado el decreto y ha aseverado que no lo apoyarán. Sin embargo, sí pedirán que se tramite como proyecto de ley, algo que se votará este jueves.
