VALENCIA, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -
Ecologistes en Acció de València ha solicitado este martes al Ayuntamiento que elabore una normativa que prohíba que los comercios de la ciudad mantengan las puertas abiertas con el aire acondicionado en marcha.
En un comunicado, la ONG ha criticado el "despilfarro energético" que se produce en "algunos comercios de la ciudad, especialmente establecimientos de moda y de franquicia", en los que "la mayor parte del aire refrigerado se pierde en la calle" al mantener "la puerta abierta de par en par, en plenos meses de verano, con el aire acondicionado funcionando".
Además, han defendido que "a menudo los usuarios se quejan de las bajas temperaturas que soportan en verano cuando frecuentan cines, comercios o establecimientos hosteleros".
Desde Ecologistes en Acció han reprobado las prácticas "derrochadoras de energía" desarrolladas por algunos comercios en los los últimos años, como mantener sus puertas abiertas todo el año a pesar de utilizar sistemas de calefacción o aire acondicionado.
Han denunciado que "algunos comercios llegan a prescindir de las puertas de acceso", mientras que "los pequeños comercios familiares mantienen normalmente las puertas cerradas".
Según las mismas fuentes, un único comercio emite a la atmósfera más de una tonelada de CO2 al mes "a base de derrochar la energía de la climatización del aire acondicionado si tiene las puertas abiertas", de acuerdo con el estudio 'Mentes abiertas, puertas cerradas' elaborado en 2007 por la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU).
AHORRO DEL 75% DE LA FACTURA ELÉCTRICA
Además, la ONG ha recalcado que cerrar las puertas ahorraría a las tiendas un 75 por ciento de su factura eléctrica dado que los establecimientos que mantienen abiertas sus puertas "malgastan entre el 20 y el 25 por ciento del aire acondicionado que utilizan", según el cálculo de la Autoridad Energética de Long Island (Nueva York).
Desde Ecologistes en Acció han pedido a los comerciantes un "cambio de actitud más adecuado a las medidas establecidas en el Protocolo de Kioto", al tiempo que han recomedado a los ciudadanos que "se dirijan a los responsables para pedir que se corrija esta situación, ya que el consumo energético excesivo nos afecta a todos".
Han defendido igualmente "otras alternativas más respetuosas con el medio ambiente y que utilicen menos energía, sin incrementar el volumen de ruido y la temperatura ambiental exterior", tales como mantener puertas y ventanas cerradas cuando funcione el aire acondicionado; utilizar toldos para aislarlas y reducir la temperatura en fachadas y solados de terrazas que irradian el calor.
También aconsejan utilizar ventiladores que consumen menos energía que los aparatos de aire acondicionado y añaden que, además, los que se instalan en el techo pueden utilizarse también en invierno para distribuir mejor el calor.
Por último, desde la ONG recomiendan establecer la temperatura del interior de los establecimientos entre los 25º y 26º, así como controlar el adecuado mantenimiento del aparato para que funcione a óptimo rendimiento.
