ALICANTE, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los hoteles de 4 estrellas 'superior' de Benidorm (Alicante) rozan el 90 por ciento de ocupación a causa del Benidorm Fest. Estos establecimientos alojan actualmente a todo el operativo técnico, producción y artístico, así como un perfil de visitantes de "alto poder adquisitivo".
Así lo ha destacado la Asociación Empresarial Hotelera y Turística de la Comunitat Valenciana (Hosbec) en un comunicado, al tiempo que ha resaltado que gracias al evento se alcanzan estas cifras en "un fin de semana tradicionalmente marcado por la temporada baja".
De acuerdo a los datos calculados por la patronal, los hoteles de categoría 4 estrellas 'superior' anotan un 89,1% de ocupación media, con lo que superan en 7,1 puntos los valores alcanzados el fin de semana anterior.
En cuanto a la totalidad de la planta hotelera, para el fin de semana Benidorm ya ha vendido el 77,8% de todas sus habitaciones, lo que ya supone un incremento de 6,9 puntos porcentuales respecto al mismo periodo de la semana anterior (70,9%).
Lo mismo ocurre con el resto de categorías analizadas --hoteles de 3 y 4 estrellas--, que también han experimentado incrementos de 8,1 y 6,7 puntos respectivamente en relación a la semana anterior. Hosbec destaca que son datos son "muy positivos" y espera que sigan mejorando a medida que se acerque la final del Benidorm Fest 2023, que se celebrará este sábado 4 de febrero.
El presidente de Hosbec, Fede Fuster, ha destacado "la fortaleza de este evento para la ciudad, no solo en ocupación hotelera y productividad esta semana, sino en imagen, proyección internacional y una indisoluble relación entre Benidorm y la música".
En la misma línea, ha defendido que es necesario "ser imaginativos y trabajar de manera conjunta y coordinada para atraer eventos que impulsen la temporada baja". "Toda esa inversión se recupera con creces y porque el turismo vuelve a ser la locomotora de nuestra economía", ha sostenido.
La segunda edición del Benidorm Fest será la primera que se celebre sin restricciones, pues el pasado año estuvo marcada por la ola de omicron, que impidió la asistencia de miles de eurofans. Así, aunque fue un gran éxito mediático y de imagen, "no se pudieron recoger frutos de rentabilidad empresarial y turística directa".
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