VALÈNCIA, 12 May. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, ha valorado la decisión del Consejo de Ministros de aprobar ayudas para regenerar las zonas afectadas por los incendios de Artana (150.000 euros) y de Xàbia y Benitatxell (150.000) que tuvieron lugar el verano pasado en las provincias de Castellón y Alicante, respectivamente.
"El Gobierno va a destinar 25 veces más que el Consell para realizar los trabajos post-incendio y ayudar a regenerar la zona de Artana con un gran valor ecológico y medioambiental. Este es un Gobierno que actúa vía hechos y no grandes anuncios que después se quedan en nada", ha destacado Moragues a través de un comunicado.
Además, ha subrayado que "la Granadella --playa de Xàbia afectada-- tiene un gran valor no sólo ambiental sino también turístico", por lo que el Gobierno "va a dedicar todos sus esfuerzos a recuperarla".
En conjunto, el delegado ha recordado que durante las últimas dos semanas el Gobierno ha aprobado más de medio millón de euros para a regenerar los grandes incendios ocurrido el verano pasado en la Comunitat.
Concretamente, el Ejecutivo destinará 550.000 euros para:
Actuaciones hidrológico-forestales de emergencia por temporales torrenciales acaecidos sobre el área afectada por incendio forestal en los términos municipales de Jávea y Benitatxell, provincia de Alicante por un importe de 150.000 euros.
La misma cantidad se invertirá en actuaciones hidrológico-forestales de emergencia por temporales torrenciales acaecidos sobre el área afectada por incendio forestal en los términos municipales de Artana, Alcudia de Veo, Tales, Aslida y Onda, provincia de Castellón
Junto a estas dos ayudas aprobadas en el último Consejo de Ministros, la semana pasada el Gobierno acordó dotar con 250.000 euros los trabajos hidrológico-forestales en la provincia de Valencia por temporales de lluvias torrenciales acaecidos en los términos municipales de Bolbaite, Chella, Anna, Estubeny, Sellent, Cotes, Sumacàrcer, Carcaixent, Simat de la Valldigna, Alzira y Xàtiva.
Desde Delegación de Gobierno recuerdan que los incendios provocaron cuantiosos daños que afectaban a una superficie donde la vegetación, además de su valor ecológico, "juega un importante papel de control de la erosión-desertificación", por las características propias de la zona afectada.
AFECTÓ A MÁS DE 1.534 HECTÁREAS
Estas zonas habían sido previamente asoladas por un incendio forestal el 25 de julio de 2016, con una superficie quemada de 1.534 hectáreas. Un siniestro que afectó a una zona mayoritariamente forestal con pino carrasco, incluyendo el lugar de importancia comunitaria (LIC) y la zona de especial protección para las aves (ZEPA) Sierra de Espadán, perteneciendo el 60,46% de la superficie afectada al LIC y el total de la misma ZEPA.
El fuego y las posteriores lluvias torrenciales afectaron a los términos municipales de Artana, Alcudia de Veo, Tales, Eslida y Onda en la provincia de Castellón. Los trabajos serán financiados por el Ministerio en el marco del programa de protección y mejora del medio natural y supondrán una inversión de 150.000 euros.
El objetivo es actuar contra la erosión y retirar la madera quemada y los restos que impiden la regeneración de la cubierta natural protectora, lo que reducirá el riesgo de ataque de plagas forestales sobre los árboles dañados, que pudieran afectar al resto de la masa colindante no dañada por el incendio.
Juan Carlos Moragues ha resaltado el importante trabajo que realizaron los medios humanos y materiales del Ministerio y de la Unidad Militar de Emergencias para sofocar estos grandes incendios forestales con 300 militares, 100 miembros de las Brigadas de Refuerzo y 22 medios aéreos.
"Uno de los mayores dispositivos aéreos desplegados fue el incendio declarado en la provincia de Castellón, en Artana, debido a la complicada orografía del lugar, el fuego se tuvo que combatir, principalmente, desde el aire. Por ello, lucharon contra el fuego una veintena de medios aéreos con un centenar de medios humanos entre pilotos y brigadistas de las Brigadas de Refuerzo del Ministerio (BRIF)", ha recordado Moragues.
811 HECTÁREAS EN ALICANTE
Por otro lado, Xàbia y Benitatxell sufrieron temporales torrenciales en un área afectada previamente por un incendio forestal, que se inició el 4 de septiembre de 2016 y se mantuvo activo hasta su extinción el 11 de septiembre, con una superficie quemada de 811 hectáreas, de las que 689 eran forestales.
Desde Delegación inciden en que los incendios afectan a los balances hidrológicos "no solo por la desaparición de la cubierta vegetal", que reduce el impacto de las lluvias y la captación de las precipitaciones horizontales tan esenciales al ciclo del agua, sino "también por la reducción de la infiltración y el aumento de las escorrentías superficiales".
La emergencia de las actuaciones se ha planteado ante la necesidad de llevar a cabo una actuación inmediata, provocada por los últimos temporales de lluvias torrenciales, con objeto de actuar contra la erosión y retirar la madera quemada y los restos que impiden la regeneración de la cubierta natural protectora.
Esto trata de reducir al mismo tiempo el riesgo de ataque de plagas forestales sobre los árboles dañados, que pudieran afectar al resto de la masa colindante no dañada por el incendio.
