El PP convalida el decreto del Consell que rebaja bonificaciones del impuesto de Sucesiones para reducir el déficit

La oposición rechaza la medida porque la consideran un "parche" y reclama mayor progresividad en los impuestos

Moragues interviene en la Diputación Permanente
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Europa Press C. Valenciana
Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 20:51

VALENCIA, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

El PP, en la Diputación Permanente de las Corts Valencianes, ha convalidado el decreto ley que aprobó el Consell el pasado 2 de agosto por el que se rebaja del 99 al 75 por ciento la bonificación del Impuesto de Sucesiones para los parientes más cercanos, con el objetivo de poder cerrar el ejercicio 2013 con el déficit del 1,6 por ciento marcado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) para la Comunitat Valenciana.

El Consell espera recaudar 133,6 millones al año, cuando su aplicación sea completa a partir de 2015 y, además, incluyen medidas de lucha contra el fraude fiscal y el fomento del cumplimiento voluntario de las obligaciones tributarias.

La vigésimo quinta Diputación Permanente de las Corts se ha celebrado en la sala multiusos de la cámara, que habitualmente se utiliza para las comparecencias de prensa, donde se ha dado acomodo a los 22 diputados que la componen, a los medios de comunicación a los asesores de los grupos, así como a las conselleras de Bienestar Social, Asunción Sánchez Zaplana, y la de Infraestructuras, Isabel Bonig, que también han estado presentes en este minipleno.

El conseller de Hacienda y Administración Pública, Juan Carlos Moragues ha defendido la aplicación de estas modificaciones para que "quien más tiene, más tiene que contribuir", al tiempo que ha asegurado que este decreto se enfoca para "preservar el gasto social" y que "no afecte a los ciudadanos en su día a día ni restrinja su capacidad de gasto y consumo".

Desde los grupos de la oposición han calificado de "parche" este decreto ley del Consell a una situación de "quiebra técnica" de la Generalitat. Al respecto, han señalado que el "problema" de la administración no es con el gasto social, sino con los ingresos y por eso han exigido al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que reclame el pago de la deuda histórica, que han cifrado en 13.000 millones, la mejora de la financiación autonómica y una mayor progresividad en la aplicación de los impuestos.

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