VALENCIA, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Valencia ha considerado este jueves que el balance del área de medio ambiente realizado por el equipo de gobierno municipal del Partido Popular "incluye mucha retórica y demuestra la falta de compromiso con la sostenibilidad", como evidencia "el carácter oculto de la Agenda 21 en la ciudad, que contrasta con el protagonismo que otras ciudades conceden a este fantástico instrumento de participación".
Así lo ha indicado en un comunicado la concejala del PSPV Carmen del Río, quien ha negado que el PP haya cumplido su programa electoral en materia de medioambiente en un 95 por ciento y ha citado algunos "incumplimientos" de "promesas" como la ampliación del parque de Benicalap, la creación de una ruta verde que conecte con parques y bulevares, la realización de un plan de itinerarios rurales y la redacción de un programa para la conservación y revitalización de la huerta, entre otros.
Para Del Río, "la ausencia de política medioambiental del PP es un ejemplo paradigmático de su escaparatismo propagandístico, llevado al delirio con la creación de una concejalía sobre el cambio climático". "Prácticamente todos los instrumentos legales y técnicos adoptados han sido iniciativas del Grupo Municipal Socialista, como la firma del Tratado de Aalborg, la puesta en marcha de la Agenda 21, la contratación de una auditoria ambiental, aún no publicada o la creación del consejo municipal de medio ambiente, constituido pero no convocado desde 2003", ha indicado la edil.
Respecto a la contaminación acústica, Del Río ha señalado que el Partido Popular "ha seguido en los últimos años una estrategia de desplazar las estaciones de medición de contaminación atmosférica a zonas con escaso intensidad de tráfico y numeroso arbolado para maquillar las estadísticas de calidad del aire".
"La situación no es mejor respecto a la contaminación lumínica", ha afirmado la concejala socialista, quien ha destacado que la alcaldesa, Rita Barberá, "lleva 19 años gestionando el alumbrado sin reparar en gastos, plantando un bosque de farolas para que Valencia fuera la ciudad más iluminada del mundo".
En su opinión, "ello arroja un triste balance de derroche energético, contaminación lumínica, emisión excesiva de gases y derroche presupuestario". "Valencia no es la ciudad mejor iluminada, sino la más iluminada, lo que le convierte en paradigma de derroche energético. Más luz no es sinónimo de mejor iluminación y mejor iluminación no significa poner más luces", ha aseverado.
La edil ha considerado como "ejemplo del derroche energético" que el Ayuntamiento de Valencia haya invertido más de 160 millones de euros en alumbrado público en el periodo 1992-2010. El número de farolas de la ciudad se ha incrementado de las 46.918 existentes en 1994 a las 97.097 instaladas en 2008. A su vez, la factura eléctrica ha experimentado un "importante incremento", pasando de 2.570.942 euros en 1992 a más 8.385.480 euros en 2008, ha comentado del Río.
Respecto al ruido, la concejala ha comentado que la declaración de cuatro zonas acústicamente saturadas "por mandato judicial", en Xúquer, Juan Llorens, Woody y el Carmen, "ha sido consecuencia del fracaso del equipo de gobierno municipal en abordar el problema de la contaminación acústica, en sensibilizar y concienciar a la población, en pactar soluciones con las partes implicadas y en fomentar el diálogo entre los vecinos".
Para Del Río, "las soluciones pasan por evitar la saturación de locales que provocan la aglomeración de personas, vigilar el consumo de alcohol en vía pública, controlar los horarios de cierre de los locales, certificar su insonorización, mejorar los problemas de tráfico y corregir actuaciones inapropiadas en las calles de la ciudad". "Y hacerlo, sobre todo, propiciando el consenso mediante el diálogo con hosteleros, vecinos y usuarios", ha resaltado.
PARQUES Y JARDINES
Respecto a los parques y jardines, Carmen Del Río ha indicado que cuando en 2008 se aprobó la revisión preliminar el PGOU, el equipo de gobierno del Partido Popular "no había ejecutado 221 parcelas destinadas a zonas verdes".
Posteriormente, el Fondo Estatal de Inversión Local para el Empleo del primer Plan E y el Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local del segundo Plan E "han permitido reducir el déficit dotacional de zonas verdes hasta las 197 parcelas", ha asegurado la edil.
