ALICANTE, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha lamentado este miércoles que la aplicación de una política "miope" y "cortoplacista" ha afectado a la Educación y, frente a ello, ha apostado por un "gran pacto" que revierta la actual situación.
Puig ha realizado estas manifestaciones durante su discurso en la apertura del curso universitario de la Comunitat Valenciana, que este año se de ha desarrollado en la Universidad de Alicante (UA). En sus palabras, el 'president' ha afirmado que los recortes presupuestarios "se han cebado" en áreas "tan importantes y sensibles como Educación" y han dificultado el acceso a la Universidad de personas "con capacidad, pero que no pueden económicamente".
Por ello, ha reclamado un "gran pacto" que impida que "una generación de jóvenes vean condicionado su futuro por una política miope y cortoplacista". La sociedad, ha añadido, no puede "condenar de forma mediocre" a una generación de jóvenes por la adopción de una política educativa "instalada en una cierta insensibilidad".
Según ha considerado, la Comunitat Valenciana necesita de una generación de estudiantes "activa y despierta, crítica y reivindicativa" y ha creído que "todo puede ponerse en cuestión" y "resetearse" y "sobretodo aquello que es injusto".
Así, ha estimado que "una sociedad que les margina, es una sociedad que no es inteligente, que divide e ignora la realidad de muchos de sus miembros debe cambiar".
Ante ello, el president de la Generalitat ha manifestado que las universidades valencianas tendrán en el Consell "un gran aliado" y ha dicho que tiene "la obligación" de dar a las universidades "los instrumentos para hacer posible que los estudiantes construyan su mejor futuro".
No obstante, ha remarcado que ese proyecto requiere de unos recursos "suficientes" que la Generalitat "no tiene". "La disminución de los fondos ha sido devastadora", ha lamentado y ha indicado que la inversión en I+D+i en las universidades públicas valencianas ha caído un 41 por ciento.
Unas cifras con las que "no es posible" apostar por una economía del conocimiento y donde "no habrá cambio de modelo productivo, sin una universidad fuerte y capaz de sustentarlo. "Necesitamos un nuevo modelo den financiación que contemple una realidad y que dé respuesta a una nueva economía", ha aseverado.
Asimismo, ha recordado que la Generalitat ha adoptado medidas "puntuales" como un nuevo sistema de becas dotado con un millón de euros y sin el requisito de una nota mínima de 5,5 puntos y la eliminación de las tasas universitarias para las víctimas de violencia de género y sus hijos.
Puig se ha felicitado por la solidaridad de las universidades para con los refugiados sirios porque "el compromiso de solidaridad nos hace más dignos y fuertes". Ha terminado su discurso aclamando: "viva por siempre la inteligencia. Muera para siempre la ignorancia".
SIN FINANCIACIÓN, NO HAY EXCELENCIA
El solemne acto de apertura de curso en la Universidad de Alicante ha contado con la asistencia de los rectores de todas las universidades valencianas, tanto públicas como privadas, así como del conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deportes y sus directores generales en materia de educación superior, entre otras muchas personalidades políticas, institucionales y académicas.
Por su parte, el rector de la Universidad de Alicante, Manuel Palomar, ha centrado su discurso en el que considera "el verdadero problema de la universidad pública española: la financiación".
"No es factible, aspirar al nivel de los centros de excelencia universitaria del mundo con una inversión por alumno más baja que la de aquellos", ha dicho, y ha supeditado "el buen cumplimiento de nuestros compromisos", a la puesta en marcha de una Ley de Financiación de las Universidades "estable y equitativa", "que nos permita desarrollar nuestras labores en un marco de estabilidad presupuestaria y normativa".
"SEVERA DIETA DE FINANCIACIÓN"
Palomar ha recordado la "severa dieta de financiación" a la que han sido sometidas las universidades valencianas "entre 2004, bastante antes de que la crisis se anunciara y en coincidencia con una inversión pública alternativa y ruinosa en múltiples Grandes Proyectos y Ciudades Temáticas, y 2014".
Además, el rector ha cuestionado la idoneidad del momento para el paso de un sistema como el actual, 4+1, cuatro años de grado y uno de máster, a un modelo 3+2, tres de grado y dos de máster.
Palomar ha sometido esta implantación al cumplimiento de dos requisitos previos, que a su juicio, distan mucho de ser reales: "la igualación significativa de los precios de matrícula del grado y del máster y una política de becas acertada y acorde con la igualdad de oportunidades y la cultura del esfuerzo".
Ha recordado que este curso se celebrarán elecciones rectorales, "tiempo de balance, de rendición de cuentas", ha dicho. Ha apuntado, parafraseando a Einstein, que aunque "sabemos que no todo lo que importa se puede medir, y que no todo lo que se puede medir importa", también "todo lo que se puede medir es mejorable, y que no puede decirse lo mismo de lo que no es medible, de los intangibles, que también deben ser considerados".
El rector ha insistido en que la universidad en la que cree es aquella "que gestione los recursos públicos de manera eficaz, eficiente y transparente" y que sea "lugar de encuentro de todos los agentes sociales".
El rector ha terminado su discurso brindando "apoyo sin fisuras a aquellas demandas y reivindicaciones justas y necesarias, bien sea en favor de una financiación equitativa", así como de toda medida que contribuya a mejorar el bienestar de los que aquí trabajamos y vivimos y un orden social más justo e inclusivo. En suma, más democrático".