VALENCIA 23 May. (EUROPA PRESS) -
El Sindicato Federal Ferroviario (SFF)-CGT anunció hoy, a través de un comunicado, que ha comenzado una campaña de asambleas y visitas a todos los centros de trabajo, para estudiar la "posibilidad de convocar movilizaciones durante los próximos meses" en RENFE-Operadora y ADIF, con el fin de luchar contra la "cascada de agresiones" que están sufriendo los trabajadores, y como medida de protesta ante los despidos de trabajadores y la "saturación" de los servicios ferroviarios.
Al respecto, el sindicato explicó que desde la entrada en vigor de la Ley del Sector Ferroviario, "aprobada por el anterior gobierno del PP y puesta en marcha por el actual del PSOE", que "supuso la ruptura de RENFE y el comienzo de la privatización del ferrocarril", los "problemas que padecen los trabajadores y usuarios del ferrocarril se vienen incrementando de forma constante", aseguró.
En este sentido, apuntó que "la reducción del poder adquisitivo de los trabajadores ferroviarios contrasta con los fuertes incrementos de las tarifas sufridas por los usuarios en el presente año".
Asimismo, indicó que la reducción de plantilla que conllevan los Expedientes de Despido Colectivo firmados recientemente, que suponen la "destrucción" de 2.000 puestos de trabajo en RENFE-Operadora y 2.500 en ADIF, tienen una "grave incidencia, no sólo en el aumento de saturación de los trabajadores, sino también en los usuarios", a los que "cada vez se priva de más servicios y se les prestan en peores condiciones", subrayó.
En este punto, SFF-CGT señaló que "al cierre de estaciones y dependencias se añade la externalización de trabajos y la subcontratación". De este modo, argumentó que los trabajadores vinculados directamente a las empresas ferroviarias, cuyo número es "cada vez más escaso", dijo, están viendo "cómo se empeoran sus condiciones laborales, mientras que la inmensa mayoría de trabajadores del ferrocarril están sometidos a unas condiciones de precariedad permanente y son víctimas cotidianas de los accidentes laborales", aseveró.
Al mismo tiempo, la "cada vez más exigua plantilla se ve sometida a continuos incumplimientos, por parte de la empresa, tanto de la condiciones laborales como en los tiempos de trabajo", sostuvo, lo que "incide directamente en las condiciones de seguridad que afectan a los usuarios", precisó.
El sindicato afirmó que "la única respuesta de la dirección de ambas empresas, RENFE-Operadora y ADIF, a los problemas que está generando su gestión de un servicio público, al que aplican criterios puramente mercantilistas, anteponiendo intereses particulares a los intereses públicos, es la represión contra los trabajadores, a los que pretenden convertir en víctimas tanto de su propia incompetencia gestora como de su incapacidad para afrontar los problemas que ellos mismos han creado".