VALENCIA 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado viernes en la zona de las 'casitas rosas' del Distrito Marítimo de Valencia a tres personas, dos de ellas matrimonio, como presuntas autoras de un delito contra la salud pública. La pareja supuestamente se encargaba de distribuir la droga entre los compradores, mientras que la otra persona presuntamente guardaba parte de la droga en su domicilio para ir proveyendo en pequeñas cantidades a la pareja, según informó la Jefatura Superior de Policía en un comunicado.
Los detenidos --un matrimonio de origen español, compuesto por una mujer de 20 años y un hombre de 26 y una mujer de 27 años, de nacionalidad boliviana-- habían establecido importantes medidas de seguridad en su domicilio, como una puerta de acceso de hierro, con una ventanilla con barrotes, desde donde presuntamente suministraban las dosis a los compradores.
A los detenidos se les intervino unos 100 gramos de heroína y 35 gramos de cocaína. Parte las sustancias las llevaba ocultas una de las mujeres en su ropa interior y el resto en el pañal que tenía puesto el bebé que llevaba en brazos.
Los policías registraron dos domicilios del barrio de la Malvarrosa en los que intervinieron 30 gramos de heroína; 20 gramos de cocaína; 790 gramos de marihuana; 3.200 euros; tres ordenadores portátiles y varios teléfonos móviles; dos cámaras de video digitales y pequeños aparatos electrónicos y un proyector de diapositivas.
Las investigaciones se iniciaron a principios de este mes al tener conocimiento los policías de que una familia residente en el barrio de las 'casitas rosas' de la Malvarrosa podría estar dedicándose al tráfico de cocaína y heroína.
Como consecuencia de las investigaciones, los policías averiguaron la ubicación exacta desde donde el matrimonio de origen español podría estar dedicándose a distribuir las sustancias estupefacientes, por lo que establecieron un dispositivo de vigilancia en torno a la vivienda.
Durante el dispositivo, los policías pudieron comprobar que la afluencia de supuestos compradores al domicilio era constante desde primeras horas de la mañana, así como que el matrimonio podría actuar en colaboración con otra mujer, que supuestamente era la encargada de guardar la mayoría de la sustancia estupefaciente en su casa, para que en caso de que se produjera una actuación policial no les fuera ocupada toda la droga.
El pasado viernes por la tarde los agentes establecieron el dispositivo policial para detener a los sospechosos cuando estuvieran fuera de sus domicilios y así evitar que pudieran deshacerse de la droga aprovechando los extremas medidas de seguridad que tenían instaladas en la vivienda, como una puerta de hierro maciza con barrotes.
Los policías les detuvieron cerca de los domicilios y se incautaron de un total de 130 gramos de heroína, 55 gramos de cocaína y 790 gramos de marihuana. Los detenidos, uno de ellos con antecedentes policiales, pasaron ayer a disposición judicial.