VALENCIA, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Teléfono de Asistencia al Menor de la Comunitat Valenciana --900 10 00 33--, dependiente de la conselleria de Bienestar Social, recibió un total de 1.319 consultas, de las que 147 eran cuestiones relacionadas con agresiones físicas y sexuales y 93 relativas a problemas de abandono, negligencia o aislamiento.
Los problemas conductuales de los menores, tales como fugas, robos y agresiones y solicitudes de ayuda por trastorno psicológico del menor, también constituyeron un importante número de consultas, siendo 86 y 37 respectivamente.
En relación con la edad que consta de los menores objeto de las consultas, el informe de la conselleria de Bienestar Social señala que el mayor número, concretamente 373, tienen entre 12 y 17 años; 264 cuentan con una edad comprendida entre 6 y 11 años, y 283 tienen de 0 a 5.
Además, la mayor parte de las llamadas recibidas, concretamente, 1.125, proceden de particulares y, de ellas, en 516 ocasiones fueron los propios menores quienes llamaron, seguidos de las madres, con 389 consultas, mientras que de padres se registraron 112 llamadas. "También son numerosas las llamadas de otros familiares, amigos, personas sin relación alguna con el menor o de vecinos", apuntaron.
Por otro lado, como otros años, la mayoría de los usuarios del Servicio son mujeres 952 frente a 367 varones. Respecto a la procedencia de las llamadas, es la provincia de Valencia la que más utiliza el servicio, con un total de 907 consultas. Le sigue Alicante, con 281 y Castellón, con 84.
La consellera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, explicó que este servicio es uno de los mecanismos que el Consell tiene para garantizar la protección y defensa de los menores y adolescentes, ya que, según señaló, "gracias a las consultas que recibe podemos detectar situaciones de desamparo y actuar con la necesaria rapidez que estos asuntos requieren".
Según manifestó, el Teléfono de Asistencia al Menor esta dirigido a menores con necesidades de orientación, ayuda y protección derivada tanto de problemáticas generadas por el propio comportamiento de los mismos, como de posibles agresiones de su entorno familiar, social y escolar; así como a los adultos con necesidades de orientación o de denunciar situaciones de desprotección de menores.
Respecto a los principios de actuación, el Teléfono del Menor comprueba, en primer lugar, la veracidad de la información o denuncia recibidas. A continuación, se procede a la evaluación del riego o posible desamparo en que puede quedar el menor. Terminado el estudio de la situación, se garantiza la rápida asistencia de los servicios de atención, siempre que la ocasión así lo requiera.
