VALENCIA, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT (FETE-UGT PV) rechazó hoy "rotundamente" la decisión del conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, de no suscribir el Plan Escuela 2.0 con el Ministerio de Educación "que hubiera supuesto la introducción de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación en las aulas valencianas", informó el sindicato en un comunicado.
FETE-UGT PV cree "reprobable la decisión del conseller de Educación, e inaudita la justificación que se ofrece para no aceptar participar en este proyecto, una nueva ocurrencia del conseller, que afirma que el Plan Escuela 2.0, sólo permite adquirir unos equipos de pequeño tamaño que pueden provocar daños visuales a los niños, como es la miopía".
Para la entidad, esto "sólo se explica realmente por la situación de bancarrota en la que se encuentra la Generalitat valenciana, como claramente se ha puesto de manifiesto recientemente, entre otros asuntos, con la insuficiente financiación que reciben las universidades públicas valencianas".
Tampoco comparte FETE-UGT PV las razones de tipo médico, relacionadas con la salud del alumnado, esgrimidas para desechar el Plan del Ministerio, basadas "en un sólo informe interesado, elaborado por una Fundación privada, sin contraste con otros informes y opiniones de Entidades e Instituciones públicas o de profesionales que trabajen en las mismas".
FETE-UGT PV lamenta que "de nuevo se reproduzcan situaciones que recuerdan las promesas incumplidas por el anterior conseller de Educación, Esteban González Pons, quién en el año 2002 ya prometió 18.000 ordenadores portátiles para el profesorado de secundaria y FP que nunca llegaron, como herramienta para iniciar la introducción de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación en el trabajo docente".
UGT cree que Font de Mora "está más preocupado en ofrecer una imagen de victimismo y de falta de atención del Gobierno estatal que de cubrir las necesidades de los centros educativos valencianos".
"Con esta decisión hay una pérdida de recursos económicos destinados a informatizar las aulas valencianas, sin proponer una alternativa que mejore el Proyecto del Ministerio, ya que no se tiene, ocultando con ello la dramática situación del sistema educativo valenciano y la situación de quiebra de una Generalitat valenciana endeudada y despilfarradora".
Por ello, FETE exige que la Conselleria de Educación, y por extensión el Consell de la Generalitat Valenciana, "asuman sus responsabilidades como gestores de los servicios públicos de todos los valencianos y que no antepongan a éstas sus intereses de partido".
