MADRID, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
Y tanto que sabemos su nombre. Ella es Carrie, esa niña con serios problemas para controlar su ira que vuelve a la vida en el rostro de una ensangrentada Chloë Grace Moretz.
La joven actriz, a la que hemos visto en títulos tan notables como Sombras tenebrosas, La invención de Hugo o el remake de Déjame entrar, es la protagonistas absoluta del primer cartel de esta nueva versión del filme que en el año 1976 dirigió por Brian de Palma basándose en la novela del mismo título de Stephen King.
El remake está dirigido por Kimberly Peirce, una cineasta que se prodiga poco y que cosechó su mayor éxito con su opera prima allá por el año 1999, cuando debutó con el largometraje Boys Don't Cry con el que Hilary Swank ganó su primer Oscar.
Junto a Moretz, en la remozada Carrie veremos a Julian Moore. Ellas toman el relevo de Sissy Spacek (madre) y Piper Laurie (hija con poderes sobrenaturales) en este remake que verá la luz en los cines en la primavera de 2013.
