El Instituto Cervantes presenta el proyecto 'Fahrenheit 451' para convertir la lectura en seña de identidad europea

Actualizado: jueves, 22 noviembre 2007 16:43


MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Instituto Cervantes presentó hoy el proyecto Fahrenheit 451 (las personas libro) una iniciativa inspirada en el libro de Ray Bradbury, con el que se pretende que Europa declare la lectura como seña de identidad europea. El fundador del proyecto, Antonio Rodríguez Menéndez, acompañado de la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel, depositó esta mañana en la Caja de las Letras, un legado con una carta firmada en la que se reivindica el valor de la lectura porque ésta es "un derecho humano".

Esta carta se presentará en febrero ante el Parlamento Europeo, y y con el respaldo europeo se llevará en Roma ante la Biblioteca Europea y por último en Sarajevo en un homenaje a la Biblioteca Nacional y Universitaria de Bosnia-Herzegovina, 16 años después de la destrucción de la Biblioteca de Sarajevo. "Queremos conseguir que nunca se vuelva a destruir una biblioteca", señaló Antonio Rodríguez Menéndez.

El proyecto Fahrenheit 451 (las personas libro) busca, como ocurría en la novela, que la población conozca de memoria algunos libros y los pueda recitar en voz alta. Para ello contará con voluntarios dispuestos a defender la lectura aprendiéndose un libro o una parte de un libro, unos capítulos, unas páginas o unos versos.

HOMENAJE A LA LITERATURA

En este sentido, la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel, señaló que esta iniciativa es una "semilla" que continuará en el futuro y que sirve también como un "homenaje al libro, la literatura y el poder de la imaginación".

El legado introducido hoy en 'La Caja de las Letras' del Instituto Cervantes por el responsable del proyecto Fahrenheit 451 (las personas libro) está compuesto por la carta que se entregará en el Parlamento Europeo, un Cd-- con una grabación del recitado del cuento de 'La biblioteca de Babel' de José Luis Borges por una 'persona libro' que en esta ocasión es Martín Carril Obiols-- un bote de tinta y unas semillas de manzano, el primer árbol prohibido.

La carta, bajo el título 'La lectura, derecho humano y seña de identidad europea', cuenta con la firma de Carmen Caffarel, de Antonio Rodríguez Méndez y de todos los asistentes que hoy deseen suscribirla.

Los cuatro objetos se han depositado hoy en la llamada 'Caja de las letras situada en la antigua cámara acorazada de la sede central del Instituto Cervantes y que ya custodia legados secretos donados personalmente por escritores como Francisco Ayala, Antonino Gamoneda o Carlos Edmundo de Ory.

Esta tarde se presentará al público este Proyecto Fahreheit 451 en un acto en el que participarán 70 personas que recitarán capítulos de una treintena de libros de autores españoles o hispanoamericanos, o bien que han recibido el Premio Cervantes de Literatura, o bien que han dado nombre a alguna biblioteca del Instituto Cervantes. Recitarán textos en español y en las lenguas cooficiales y en todos los idiomas de la Unión Europea, así como en el lenguaje de signos para sordos y personas con deficiencias.