MADRID, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
El escritor y Premio Nacional de las Letras 2005, Caballero Bonald, presentó hoy una antología poética de su obra, titulada 'Summa Vitae', en donde el poeta, ensayista y traductor Jenaro Talens recoge algunos de los poemas que han jalonado la vida de "uno de los mejores escritores del siglo XX", señaló Talens.
"Cada poema tiene algo de última voluntad y una antología es la suma de últimas voluntades", apuntó Caballero Bonald, quien reconoció que la poesía le "cura de obsesiones y de manías persecutorias". Para leer en alto eligió una poesía de 'Summa Vitae', que simboliza el "repertorio de su propia identidad" y "retazos de recuerdos que constituyen mi propia manera de ser".
Respecto a la elección de los poemas para este libro que publica Galaxia Gutenberg/Círculo de Lectores, Bonald confesó que cada poeta tiene "manías persecutorias" sobre algunos poemas, que Talens no ha incluido en esta antología, que parte de su libro 'Las Adivinaciones' (1952) y concluye con su alabado 'Manual de infractores' (2005), al que Bonald definió como uno de sus libros más apreciado porque le sirvió para "rejuvenecerse" en una etapa de "cabreo permanente" con temas como la invasión del Golfo o la guerra de Irak.
Entre medias, deambulan por sus páginas poemas de sus libros 'Memorias de poco tiempo' (1954),'Las horas muertas' (1959), 'Descrédito del héroe' (1977), 'Laberintos de fortuna'(1984) o 'Diario de Argonida' (1997).
Encantado con la "singularidad del enfoque" aportado por Talens y que le ha servido para confirmar "algo que ya sospechaba", dijo Bonald, como el dualismo en su obra entre compromiso y realismo, reconoció que procede de "estirpe gongorina" y que todavía le siguen "irritando" muchas cosas como "los sumisos, los obedientes o los gregarios". "La Literatura es una forma de defensa contra las ofensas de la vida", añadió.
ABANDONO DE LA NOVELA Y SUS MEMORIAS
Preguntado por sus próximos proyectos, Bonald indicó que ha "abandonado la novela" y que ya no tenía "ganas" de continuar con la tercera parte de sus memorias, pero confesó que escribía poemas de memoria en sus "horas de insomne" que probablemente algún día constituirían un nuevo libro. "Es lo único que hago literariamente y ya es mucho", advirtió.
No obstante, reconoció que "todos los poemas tienen su parte de frivolidad o banalidad" y confesó que sigue leyendo a los jóvenes poetas de los que todavía tiene mucho que aprender. "Si un viejo no aprende algo de los jóvenes está perdido", señaló.
De los libros incluidos en esta Antología, destacó también 'Laberinto de fortuna' que provocó un momento de "inflexión" en carrera literaria y recoge "experiencias de lenguaje" que "sí algo queda de mi obra--apuntó Bonald-- será este libro".
Por su parte, Jenaro Talens señaló que una prueba del "dominio" de Bonald y de la "musicalidad de la palabra" es que cualquiera de sus poemas se pueden convertir en prosa. Y le describió como un "orfebre" capaz de convertir un objeto especial como la palabra "en una forma de sensibilidad", concluyó.
