MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
Una de cada cuatro librerías que existen en España se encuentran en la Comunidad de Madrid, con un total de 918, de las cuales un 31,5 por ciento son librerías especializadas en temas específicos, según el Mapa de Librerías de la región presentado hoy. En España, en cambio, la proporción de este tipo de librerías frente a las generalistas es del 22,3 por ciento.
La región suma además 3.450 establecimientos donde se venden libros, pero que no se consideran librerías, lo que supone 8,27 por cada 10.000 habitantes, aunque en la capital hay más (9,39 comercios) que en el resto de la Comunidad (7,2). En España, en cambio, hay más comercios de este tipo, puesto que se registran 8,91 puntos de venta de libros por cada 10.000 habitantes.
Según explicó el director del informe y miembro de la empresa BCF Consultores, Xavier Cubeles, los madrileños gastan más en libros que la media nacional. Las librerías de la región madrileña tuvieron en 2004 unas ventas de 108,2 euros al año por habitante, frente a las 66,7 euros de media del resto de España, indicó.
Asimismo, Madrid capital tiene un promedio de puntos de venta y librerías por habitante superior al resto de los municipios de la región, e, incluso, que las demás comunidades españolas.
El estudio refleja también un desequilibrio dentro de la Comunidad en cuanto al tamaño de las empresas bibliográficas, puesto que la capital acumula el 98 por ciento de las librerías grandes de la región y el 92 por ciento de las medianas. "Esto lo que nos demuestra es que en los municipios de la periferia, a pesar de su gran tamaño, tienen una presencia de librerías grandes y medianas muy debilitado", dijo Cubeles.
En cuanto al tamaño, el 44 por ciento de las librerías de la región son grandes y un 60 por ciento son comercios medianos-grandes. Asimismo, en total se han censado cerca de 642 librerías pequeñas en la Comunidad, las cuales, aproximadamente, representan el 70% del total de librerías, que configuran una amplia red de distribución de libros, cuyas ventas dependen en un 30% del libro de texto escolar.
La Comunidad se diferencia asimismo del conjunto de España en la aplicación de las nuevas tecnologías, ya que el porcentaje de librerías informatizadas es inferior. "Esto puede deberse a que la mayoría de las redes de comercialización del libro se encuentran en Madrid, lo que facilita la comunicación directa entre el librero y el proveedor", añadió.
De hecho, se ha constatado que los sistemas de pedido tradicionales (por teléfono o a través de visita comercial al establecimiento) son utilizados más en las librerías de la Comunidad de Madrid, que en las españolas.
Además, Cubeles afirmó que en el centro de la capital madrileña existen librerías con características y tipos de negocio muy singulares que tienen grandes diferencias con las que se encuentran en la periferia y en otros municipios. "Por ello, recomendamos que se establezcan estrategias y políticas para cada tipología y que se tenga en cuenta que el sector librero no es homogéneo", concluyó.
