MADRID, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
Obsesionado con la búsqueda de la identidad y los enigmas de la individualidad, el escritor Suso de Toro emprendió un viaje iniciático lleno de pesquisas para seguir las huellas de su abuelo paterno, Faustino de Toro.
De esa búsqueda nació un libro "desnudador", según confiesa, que revela que lo determinante que es en nuestra existencia el origen genético y la vida de nuestros antepasados.
"La historia que se va desvelando es una historia familiar porque la historia de las familias y las personas se reconstruye en hueco y en relieve", explicó el autor, quien reconoció haber abierto "el desván" de sus antepasados hasta descubrir el "sentido oculto" de su propia vida.
HUÉRFANOS Y NIÑOS PERDIDOS
Huérfanos, niños perdidos, el miedo a ser abandonado o el miedo a no ser querido, son algunos de los aspectos incluidos en este libro, que De Toro describió como el más personal y a la vez, desafiante, al intentar mostrar su pasado y el centro de sí mismo.
Pero también realiza un viaje real que lo llevará desde Zamora, Madrid, Santiago y finalmente, Cuba, donde se pierde su rastro y a la vez va encontrado pistas sobre su pasado familiar. "Utilicé la literatura para comprender los datos que iba encontrando y reconstruir la historia", reconoció.
En este sentido, indicó que 'Siete Palabras' (Alianza Editorial) puede considerarse también un libro que revela la historia de cualquier familia, y como se remonta al siglo XIX, acaba reflejando la "historia europea, la orfandad, el abandono" o las consecuencias de la emigración, explicó.
LAS CONCIENCIAS NACIONALES
"Las conciencias nacionales o nacionalistas nos hacen vernos como únicos pero somos experiencias muy universales", advirtió este autor, Premio Nacional de Narrativa en 2003 y de la Crítica en 1994 por su novela, 'Tic-Tac' y en 2000 por 'Non volvas'.
En esta misma línea, declaró que cuando se habla de memoria histórica, "manejamos cosas incómodas" al igual que cuando una familia o una persona oculta datos de su pasado. "Si la propia sociedad hay cosas de las que no quiere hablar, por algo es", advirtió.
Asimismo, De Toro aseguró que este libro demuestra cómo la literatura sirve "para curar o cicatrizar heridas o incluso vacíos personales". "El escritor está obligado a creer en el poder de la palabra, si no su palabra será trivial", declaró.
"La vida nos parece un caos, pero este libro me enseñó que hay correspondencias entre nuestra propia vida y la vida de tus mayores", concluyó el autor.
