La ironía 'ciento por ciento' cubana del cantautor Pedro Luis Ferrer recala esta semana en el Café Central

Actualizado: lunes, 22 octubre 2007 21:03


MADRID, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

El cantautor cubano Pedro Luis Ferrer, trovador de la ironía más "difícil de dominar" tanto en La Habana como en Miami, desembarca esta semana en el Café Central de Madrid junto a su 'Bunga' para trasportar en espacio y tiempo a sus fieles seguidores con himnos generacionales como 'Ciento por ciento cubano' e intentar atrapar nuevos públicos a través del humor de doble filo embasado en canciones como 'Inseminación Artificial', 'Como me gusta 'habla' español', 'Mi padre fue fidelista' o 'Fundamento'.

Hasta el domingo 28 de octubre, los poemas del viejo autodidacta Ferrer --acompañados por la marímbula y la extraordinaria voz de su hija Lena, de quien dice Ferrer que "canta desde antes de que naciera"; su hermano Raulito a la percusión, y Mirza Sierra a la guitarra -- pasarán una breve temporada en la capital para mostrar a sus seguidores la esencia de la música popular cubana.

"Hasta de los artistas fracasados y de las canciones machaconas que suenan por la radio en el autobús, se puede sacar algo bueno", explicó a Europa Press el artista cubano, que lleva más de 35 años en trabajando con su personalísima voz y sus letras de fuerte impronta costumbrista en las que se esconde la crítica que se sabe hacer en Cuba.

Amante del maestro Paco de Lucía y deudor de la tradición musical en todas sus variedades, Ferrer presentará en Madrid algunos retazos de sus último disco 'Rústico' (Ultra records) con el viajará de gira por Austria y Suecia en 2008.

"Aunque el cielo se caiga a cachos, yo intento ser feliz", reza uno de los versos preferidos de este artista, que incluye en su repertorio guaracha, son o el guaguancó de toda la vida.

Personaje público de referencia en su país, donde hace unos años emprendió la 'tournée' bautizada por él mismo 'Gira por patios y azoteas de La Habana' en respuesta a su veto en las cadenas nacionales, regresa a España al frente de su bunga 'revoltosa' con el objetivo de reinventar las tradiciones musicales de su vieja Cuba.