Actualizado: lunes, 25 enero 2010 17:22

BARCELONA, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

El director de la zona mediterránea de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), Ramon Muntaner, explicó este lunes que la institución tiene la sensación de haber sido "demonizada" por cobrar los derechos de autor mediante un canon, a raíz del rechazo de las peluquerías de satisfacer este gasto.

En declaraciones a Rac1 recogidas por Europa Press, Muntaner argumentó que las obras protegidas por derechos de autor necesitan de una autorización para que se puedan comunicar públicamente, y subrayó que las peluquerías son espacios públicos.

Recordó que la SGAE tiene más de 111 años de historia -bajo diferentes nombres- durante los que ha administrado siempre la explotación de estos derechos. El dinero que recauda, señaló, se reparte entre los autores en función del uso de su obra en los espacios públicos.

No obstante, puntualizó que no se cobra lo mismo a una peluquería, cuya "materia prima" no es la música, que a una emisora de radio o a una discoteca, que viven de la música. La SGAE tiene convenios con el sector hostelero, de los bingos y los municipios, entre otros.

"En 111 años surgen grandes momentos en los que todo el mundo se queja y entra en la rueda tremenda en que ahora estamos inmersos", afirmó Muntaner, quien recalcó que la SGAE no hace nada que legalmente no sea posible.

Con esto, instó a la sociedad a realizar un gran debate sobre el significado de la propiedad intelectual, ya que el canon "no va contra las peluquerías ni contra los abuelos".

"Entiendo que se genere una determinada indignación a partir de no entender la situación", aseveró Muntaner, quien remarcó que la clave del asunto es la diferencia de tarifas que se aplican a los que viven de los autores y a los que ofrecen música como un "valor añadido".

Lamentó que España sea el "único país" en el que se cuestione el cobro de derechos de autor "de forma tan feroz y violenta", criticó que se trata de un debate plagado de descalificaciones.

SOLIDARIDAD

Muntaner argumentó que la SGAE no puede dejar de cobrar en nombre de los autores en el caso de galas solidarias y que, en cualquier caso, ya renuncia a los derechos de la SGAE en concepto de administrador de los derechos.

"Cuando se produce un concierto de estas características pedimos que nos aseguren que nadie va a cobrar, porque a veces cobra el intérprete, el que pone los escenarios y el de las bebidas. Por ello, cuando nos aseguramos que nadie cobra, nosotros tampoco", afirmó.

Muntaner recordó que la SGAE representa a más de 69.000 autores de música y letras, a 7.700 guionistas y directores de cine, a 7.145 dramaturgos y coreógrafos y a 200 editoriales de partituras, además de dos millones de autores internacionales para su explotación en España.