Andreu Claret recupera los Hechos de La Fatarella en una novela sobre la memoria histórica y la amistad

Actualizado: lunes, 7 abril 2008 17:46

BARCELONA, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -

El periodista Andreu Claret debuta en la literatura con la recuperación de los Hechos de La Fatarella (Tarragona) en 'El secret del brigadista' (Columna)/'El secreto del brigadista' (Planeta), una novela sobre la memoria histórica y la amistad y que se erige como "un homenaje a los campesinos" que sufrieron la Guerra Civil y a los que un bando "les quería quitar la tierra y el otro, la libertad", aseguró el autor.

Los conocidos como Hechos de la Fatarella que acontecieron en 1937 consistieron en la matanza de 37 campesinos a manos de las brigadas anarquistas, que querían colectivizar las tierras y a lo que los lugareños se resistían, "porque no había tanto que colectivizar", añadió Claret, gran conocedor de los hechos porque su padre, Andreu Claret, fue destinado a La Fatarella para "poner orden" tras la matanza, destacó el autor en una entrevista a Europa Press.

"Consiguió que volviese a funcionar, hasta que llegaron los falangistas", añadió Claret, no sin destacar que La Fatarella es "un compendio de todas las barbaridades que pasaron durante la Guerra" y que, pese a su pequeña extensión, sufrió cuatro "fuertes sacudidas" en 18 meses, al pasar una y otra vez de manos franquistas a republicanas.

En 'El secret del brigadista', la mirada ingenua de un niño guía una trama que no acentúa el dramatismo de los hechos "porque los niños tienen la capacidad de supervivencia". El pequeño encuentra al brigadista norteamericano malherido y abandonado por sus compañeros, que le dieron por muerto, y no duda en esconderle durante casi cuatro años en una casa de La Fatarella, hasta que los falangistas le matan, especificó Claret.

El brigadista ficcionado por Claret --al igual que el resto de personajes excepto su padre, que aparece en un par de ocasiones en la novela-- es "ambivalente" porque además de comunista es judío. De los 40.000 brigadistas provenientes de 40 países que actuaron en España, la mayoría eran comunistas y 4.000 eran judíos, algo que "poca gente sabe", detalló el autor.

Esta trama "verosímil" del niño y el brigadista aporta una "mirada humana sobre la Guerra" y se combina con otra en la que actualmente, cuando se cumplen 70 años de la batalla de l'Ebre, la nieta de aquel brigadista viaja a la zona para descubrir las circunstancias de su muerte, aunque su propósito topará de lleno con un misterioso asesinato en el que se verá involucrada.

LA IDENTIDAD COLECTIVA DE LA TERRA ALTA.

'El secret del brigadista' aborda la "complejidad" de la identidad colectiva de la Terra Alta, una comarca catalana singular, a juicio de Claret, por su historia, ya que en estas tierras los árabes permanecieron "casi cuatro siglos más que en el resto de Catalunya", destacó.

En concreto, esta característica se acentúa en La Fatarella, un pueblo "muy endogámico" y con "gran densidad histórica". "Es un pueblo al que le cuesta mucho recordar, porque fue muy traumático. Si la novela puede ayudar a que se haga de una forma más equilibrada, mejor", concluyó el escritor.

Para Claret, la novela no es "de buenos y malos" sino que mira "con generosidad" a "alguna de la gente que se jugaba el tipo en este bando", pero no a Franco. Y, ¿cuál era el secreto del brigadista? "La casa donde le escondieron era muy particular, con un subterráneo...", respondió sucintamente el autor.