MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Regal Barcelona, actual líder de la ACB, acusó el esfuerzo de los dos partidos europeos ante el Real Madrid y sufrió para ganar (82-87) al Suzuki Manresa, a la vez que el Unicaja dio una alegría a su afición tras doblegar (86-66) al Gran Canaria, en encuentros correspondientes a la vigésimo octava jornada en campeonato doméstico.
Los de Xavi Pascual necesitaron de una prórroga para enmendar sus paupérrimos primeros 30 minutos y acabar con un conjunto manresano que tuvo miedo a ganar. Una canasta en el último segundo de Grimau mandó el partido al tiempo extra, y ahí la calidad del Barcelona se acabó imponiendo
En los cincos minutos de añadido, Pete Mickael se erigió en el estilete blaugrana. El alero hizo gala de su calidad, por enésima vez durante esta temporada y guió a los suyos --25 de valoración-- a una sufrida victoria pero que le mantiene como líder destacado de la ACB, con tres victorias de ventaja sobre el Real Madrid,
Y es que el cansancio hizo mella en los blaugrana y desde el principio del choque se mostraron imprecisos en ataque y poco agresivos en defensa, una de las claves de los culés durante el presente curso. Seis perdidas durante el primer cuarto condenaron a los actuales campeones y pronto se vieron por debajo en el marcador (19-15).
Lejos de reaccionar, el Barcelona seguía penando en el parqué del Nou Congost y sólo un espejismo --parcial de 0-7-- fueron las credenciales de los culés en el primer acto. Ni el tan ensalzado tiro exterior funcionó y ya al descanso la diferencia era considerable, 40-26, marcada por el gran acierto de los locales.
Tras la reanudación, la imagen no mejoró y los blaugranas seguían siendo una sombra del equipo que ha deslumbrado a Europa. Apoyados por un buen juego colectivo, por el acierto en la larga distancia de Gladyr y por, cómo no, Román Montañez, los manresanos parecían allanar el caminó, pero despertaron los culés.
Cuando parecía tenerlo todo perdido, el líder de la ACB sacó casta y juego y un triple de Mickael empató el partido (73-73) a falta de 20 segundos. El Suzuki se resistía a perder y Montáñez volvió a hinchar el pecho de los suyos con una canasta que parecía dar la victoria.
Sin embargo, la respuesta sobre la bocina de Grimau mandó el partido a la prórroga y ahí apareció Pete Mickael. El estadounidense, que ralló a un nivel sensacional en los partidos ante el Real Madrid, cerró la victoria con su actuación en la prórroga, que redondeó un partido de 23 puntos para el alero.
Por su parte, el Power Electronics Valencia sufrió más de la cuenta para derrotar (92-96) a un CB Murcia que se resiste a darse por vencido y aspira a reaccionar a tiempo para intentar una remontada, que se prevé complicada.
Los locales vendieron cara su piel y presentaron batalla durante los primeros 20 minutos, (51-50). Sin embargo, un arreón naranja en el tercer cuarto y la flamante actuación de Nando de Colo, con 27 puntos, rubricaron un valioso triunfo que permite a los de Spahija afianzar un poco más su cuarta plaza.
EL UNICAJA RECUPERA LA SONRISA.
Por su parte, el Unicaja de Málaga recuperó la sonrisa al lograr una gran victoria (86-66) ante un Gran Canaria desbordado por el festival andaluz. Los de Aíto firmaron unos primeros 20 minutos impecables tanto en ataque como en defensa y pudieron brindar una alegría a la afición del Martín Carpena, poco acostumbrada a salir orgullosa de los suyos esta temporada.
Un comienzo sensacional llevó a la victoria a los malacitanos. Un ataque coral firmó 29 puntos al finalizar los diez primeros minutos y empezó a abrir brecha ante un conjunto canario inoperante y que se encontró con once puntos de desventaja al finalizar el primer cuarto, algo ya insalvable para ellos.
Un extraordinario Berni Rodríguez marcó el paso de los suyos en la anotación, y, bien secundado, por Sául Blanco y Archibald fueron suficiente para abortar a Carrol, la única amenaza canaria. Al final 20 puntos de ventaja que sirven a los malagueños para empatar con el Asefa Estudiantes en la sexta plaza.
El que no se aprovechó de la derrota de los canarios fue el DKV Juventut, que cayó derrotado (78-70) ante un Lagun Aro que cada vez ve la salvación más cerca. Los de Pepu Hernández no pudieron con un conjunto donostiarra que selló un buen último cuarto y de la mano de Ricardo Uriz acabaron con la 'penya'.
Por último, el Cajasol venció (62-63) a un Meridiano Alicante que desaprovechó una oportunidad de oro para acercarse a la salvación. A pesar de firmar una pírrica primera parte, los de Joan Plaza resurgieron los últimos instantes para aprovecharse de un error de Urtasun y mantenerse firmes en un plaza de 'play-off'.
