MADRID, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
El alero checo del Asefa Estudiantes, Jiri Welsch, no esconde su ilusión de jugar con el equipo madrileño en su país donde asegura que ejercerá de anfitrión de sus compañeros, pero donde el objetivo es ganar al CEZ Nymburk para certificar el pase a los cuartos de final de la Eurocup.
"El objetivo es certificar allí la clasificación. El Nymburk no ha ganado ningún partido en el 'Last 16', pero no hay que fiarse: no son tan flojos como para perder todos. Caserta y Galatasaray ganaron allí y si queremos conseguir la primera posición tenemos que hacerlo nosotros también", avisó el alero, emocionado con visitar su país.
Por eso, Welsch está deseando llegar a su tierra. "Es la primera vez que juego contra un equipo de mi país desde que salí en el 2000. Es especial para mí", confiesa el checo, que jugará en el pabellón de Nymburk, que está separado sólo 70 kilómetros de Pardubice, su ciudad natal.
Además, el colegial destaca la historia del rival de mañana. "El CEZ Nymburk es un equipo increíble, pero prácticamente creado de la nada. Un importante abogado compró un equipo histórico que estaba en divisiones inferiores para que fuera líder de la Liga Checa", explica.
"El primer año tras ascender quedaron terceros, el segundo, segundos, y desde la tercera temporada son campeones de la Liga Checa, llevan ya siete años seguidos", afirmó.
Un partido que para el alero del Ramiro será muy especial. "Me hace especial ilusión volver a Pardubice. Allí me formé personal y deportivamente con mi padre y en el club de mi ciudad. En la grada estarán muchos amigos y familiares, a ellos les hace todavía más ilusión", asegura Welsch, que considera "un honor hacer de anfitrión para el equipo".
