(Previa) España afronta el Carpati Trophy en Rumanía con la idea de experimentar de cara al futuro

MADRID 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

La selección española de balonmano femenino afrontará el Carpati Trophy, que se disputará desde este viernes y hasta el domingo en Rumanía, con el objetivo de ir afianzando a las nuevas jugadoras de cara al 'play-off' de clasificación para el Mundial del próximo año, que enfrentará al conjunto de Jorge Dueñas con Macedonia.

España, bronce olímpico en Pekín el pasado año, utilizará la cita para ir introduciendo a la nueva generación de talentos que permita facilitar la transición del combinado nacional. Así, el preparador nacional no contará con muchas de las habituales, bien por lesión o decisión técnica, para medirse a Alemania, Rumanía 'B' y Rumanía 'A'.

Del éxito de Pekín sólo permanecen Marta Mangué, Beatriz Fernández y Marta López (CJF Fleury), Silvia Navarro (Oltchim), Carmen Martín (Krim Mercator) y Patricia Elorza (Bera Bera), además de la nacionalizada Sandy Barbosa (Oltchim), que ya disputó el último europeo.

España tendrá como novedades a Ana Isabel Martínez, Lara González, María Muñoz, Silvia Ederra y Tiddara Trojaola. Por ello, el objetivo será dar minutos para ir comprobando la evolución de las jugadores y valorar su continuidad en la selección.

En los tres partidos que tendrá que disputar, España comenzará este viernes con Alemania, a la que ya venció (20-23) en el último Europeo, para continuar enfrentándose al combinado 'B' de Rumanía el sábado y a Rumanía 'A' el domingo.

El seleccionador nacional, Jorge Dueñas, ha señalado que el objetivo principal para el torneo será "competir al máximo nivel y que todas las jugadores disfruten de minutos", recalcando que la visión del combinado español está puesta sobre todo en el 'play-off' ante Macedonia, con un billete para el Mundial de Serbia en juego.

El técnico bilbaíno quiso explicar las causas de aprovechar el torneo para poder ver nuevas jugadores en un contexto diferente. "Hemos querido aprovechar para dar descanso y dosificar a muchas jugadoras que, tras el año olímpico, llevan demasiados partidos en sus piernas. Además es una oportunidad para ir dando minutos a muchas jugadoras que por méritos propios están llamando a la puerta de la selección y deben adquirir experiencia internacional", valoró Dueñas.