LISBOA, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
La selección portuguesa aterrizó esta mañana en el aeropuerto lisboeta de Portela, decepcionada con su eliminación en los octavos de final del Mundial ante España, pero con Carlos Queiroz satisfecho por el trabajo y asegurando que con su labor han "dignificado y prestigiado" al fútbol del país.
"Las respuestas hay que darlas después de reflexionar, para dar una respuesta cierta. Es el momento de descansar, analizar con tranquilidad lo que estuvo bien y lo que estuvo mal", expresó el seleccionador.
Queiroz recalcó que la sensación era agridulce, ya que regresan de Sudáfrica "un poco decepcionados por haber sido eliminados, porque la ambición era grande", pero también "con la conciencia tranquila": "Hicimos un buen trabajo, fue un deber cumplido".
"Dignificamos y prestigiamos el fútbol portugués. Perdimos contra un gran equipo que es España. Ahora sólo tenemos que hacer una cosa: descansar, concentrarnos para ver qué tenemos que cambiar y volver más fuertes", resaltó, considerando que su dimisión está "absolutamente" fuera de cuestión.
Pocos aficionados, y con bastante disgusto y con pancartas duras y críticas contra el técnico, les esperaban a la llegada, y Fabio Coentrao fue de los pocos que se llevaron autógrafos antes de subirse al autocar junto al técnico Bruno Alves y Hugo Almeida, ya que la mayoría se marchó en sus coches, entre ellos Cristiano Ronaldo, con rostro serio.
Además, disintió de las críticas de Jose Mourinho, que consideró que Ronaldo estuvo muy solo. "Siempre tuvimos un equipo en el campo, Como en determinados momentos España usa sus galones como a Villa o Portugal a Messi, nosotros tenemos a Cristiano, a Simao o a otros, que han ido apareciendo. Unas veces fue Tiago, otras Raul Meireles... y así llegamos hasta aquí", consideró.
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