MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El técnico del Real Club Celta de Vigo, Abel Resino, ha asegurado durante su primera comparecencia como entrenador del conjunto gallego que la decisión de no contar con Salva Ballesta como segundo entrenador la tomó "el club", y que darle más vueltas al asunto es "perder tiempo para preparar el partido ante el Granada" y estéril para afrontar "un reto difícil, pero apasionante y bonito".
"Es una decisión que en su momento tomó el club. Yo ya hablé con Salva y ese tema está aclarado. No caben más comentarios. No hay que darle más importancia. Todo lo que perdamos en esto es perder tiempo para preparar el partido ante el Granada y desviar la atención, que es precisamente lo que yo no quiero", declaró el preparador toledano en rueda de prensa.
Resino, que confirmó que José Pérez Serer, 'Pep' Serer, será su segundo entrenador, y Miguel Peiró su preparador físico, indicó que asume "un reto difícil, pero apasionante y bonito". "Cuando me llamó el Celta valoramos un poco todo. Somos conscientes de que es un reto difícil, pero nuestro objetivo es intentarlo hasta el último segundo para que este gran club siga gozando de la Primera División del fútbol español", indicó.
El manchego tiene claros los objetivos. "El Celta es un gran club y tiene una muy buena plantilla. Nos falta dar un paso más y subir el nivel de competición, y estoy plenamente convencido de que si conseguimos esto lo más rápido posible el próximo año seremos un equipo de Primera División", subrayó.
"Siempre me han hablado bien de este club. En lo que poco que llevo veo una gran organización y sobre todo compuesto por profesionales que tienen un gran nivel. Por todo ello, decidí aceptar venir a Vigo", añadió al respecto.
Además, Resino destacó la "predisposición de la plantilla para poner freno a la mala situación. "Es un vestuario de buena gente, hay una buena predisposición a trabajar. Ellos son consciente de que en el fútbol, cuando se pasan por estas situaciones hay que asumir su parte de culpa. Las plantillas tienen que asumir que no siempre los entrenadores son culpables", afirmó.
"He hablado con los capitanes cuando he llegado, con los cuatro. Les he marcado un poco las pautas que entiendo que tiene que seguir esta plantilla para el futuro. Luego se lo he transmitido también al resto. Es pronto para valorar todo esto porque hemos hecho sólo una sesión de entrenamiento", aseguró el exportero, antes de decir que le confirmaron que están "tranquilos" dentro de que la situación "no" es la que les "gustaría".
"LAS REVOLUCIONES NO SON BUENAS NI HAY TIEMPO PARA HACERLAS".
El nuevo técnico del conjunto vigués defendió la labor de Paco Herrera y reconoció que habrá cosas del catalán con las que se quede. "Hay que seguir en una línea de trabajo en la que estuvieron, quedarnos con eso bueno que ellos han tenido durante este tiempo, e intentar mejorar cosas que yo creo que son más que mejorables. Si seguimos en esta dinámica no llegaríamos a ningún sitio, así que hay que buscar algo más para que nos dé ese 'plus' para que el equipo pueda salir de esta situación", aseguró.
"Hay que quedarse con lo mejor que ha tenido este Celta, que ha tenido momentos brillantes esta temporada. Ha sido un equipo muy competitivo; es cierto que ha caído en una dinámica mala, pero hay que recuperar lo bueno y aumentarlo en la medida que podamos", prosiguió.
Sin embargo, aseguró que la plantilla, que "tiene que terminarse de creer que es buena, que tiene calidad", debe aumentar en competitividad. "Tiene que ser un equipo mucho más fuerte compitiendo, con muchísima más intensidad en el partido durante noventa minutos. Si no llegamos a un nivel de competitividad importante a los equipos pequeños les cuesta más ganar en Primera. Hay que conseguirlo como sea y lo antes posible. No tenemos un margen ni una pretemporada que preparar", indicó.
De cara al partido del próximo domingo ante el Granada (17.00 horas), Resino destacó que era "importantísimo", pero no una final de cara a esta "temporada atípica, muy fraccionada". "Las finales son cuando no se juegan más partidos. Es un partido importantísimo, porque es un rival parecido a ti, pero lógicamente no podemos decir que es una final", explicó el míster, que aseguró que no piensa hacer grandes cambios en el once porque "las revoluciones ni son buenas ni hay tiempo para hacerlas".
"El Celta tiene que llegar al último tramo de la Liga, en los últimos seis o siete partidos, metido en la pelea. Hay que pasar una 'cuesta de enero' importante -reciben a Real Madrid y Barcelona y visitan Riazor en el mes de marzo- y estar metidos en la pelea, es primordial", aseveró el toledano.
"QUEREMOS QUE NOS AYUDE A SACAR EL PROYECTO ADELANTE".
Por su parte, el presidente del club gallego, Carlos Mouriño, aseguró que la decisión de contratar a Abel Resino sirve para "dar un pase adelante". "Es una nueva opción que nos ofrece por su entusiasmo, su fuerza y su voluntad y esperanzas de que el equipo se quede en Primera División", aseveró.
Mientras, el director deportivo, Miguel Torrecilla, que confirmó que Resino ficha "por lo que resta de temporada y una más", se mostró confiado en que el técnico toledano cumpla "su reto". "Sabemos el reto que llega para asumir en el Real Club Celta de Vigo y nuestra ilusión puesta en Abel es para conseguir, como ha hecho habitualmente, sus retos. Queremos que nos ayude a sacar el proyecto adelante. A partir de ahí, Granada es el objetivo y donde todos tenemos que tener puesta la cabeza", concluyó.
