MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Granada, Lucas Alcaraz, aseguró que su equipo tiene que pensar en sí mismo y mantenerse "con la cabeza fría" en todo momento para lograr la victoria en el enfrentamiento de la decimoctava jornada de LaLiga Santander entre equipos de la parte baja de la tabla, ya que se mide a Osasuna en el Nuevo Los Cármenes (18.30 horas).
"Nosotros tenemos que pensar en nosotros y el partido que espero es que juguemos con la máxima determinación e intensidad, y de alguna manera con la cabeza fría, deportividad y los ojos inyectados en sangre desde que nos levantemos por la mañana. El resto pasará en el campo", señaló en la rueda de prensa previa al choque.
"Tenemos que tener dos cosas; una es mentalmente la cabeza fría y dos, la máxima intensidad desde el primer minuto. Nosotros sabemos qué tenemos que hacer y lo tenemos que hacer con la máxima determinación posible", agregó.
El técnico granadino reconoció que su equipo no puede "esperar", y que la clave del partido pasa por "la intensidad" y por tener las ideas "muy claras" para saber manejar "cada fase" de un encuentro en el que el objetivo es "ganar" a un rival al que guarda "máximo respeto".
"Ahora solamente podemos pensar en el partido y en la intensidad que le vamos a meter, en tener las ideas muy claras, en saber manejar cada fase del partido y en ganar. "Nosotros no estamos para esperar. Tenemos que ir a buscar el partido con argumentos pero con la fija idea de que tenemos que ganar el partido. El equipo tiene argumentos más que conocidos por los jugadores pero lo importante es ir a ganar", indicó.
"Osasuna tiene el impulso del nuevo entrenador y con un resultado que siempre han ido empatado pero no nos vamos a recrear en eso, tenemos máximo respeto al rival pero en el partido tenemos que proponer nosotros las cosas y no pensar en qué va a proponer el rival", añadió.
En cuanto a la afición, Alcaraz aseguró que entiende la situación que esta atraviesa y su enfado con el club, pero confía en que va a "ayudar" y "apretar al máximo", dejando al margen todo lo que está sucediendo.
"El tema de la afición ahora mismo es difícil solicitar nada. Es normal que estén cabreados conmigo, con el equipo, con los fichajes, o con todo. Estoy plenamente convencido de que la afición va a estar con nosotros y que va a ayudar al equipo en las fases de duda y en las que las cosas no salgan, y va a apretar al máximo, independientemente de que tengan toda la razón del mundo al estar cabreados con lo que ha pasado", concluyó.
