MADRID, 5 DE AGOSTO (EDIZIONES)
El partido que se disputará la tarde del 5 de agosto de 2015 entre el Bayern de Munich y Real Madrid no va a ser un partido de pretemporada como cualquier otro. Va a ser un partidazo en toda regla. Los partidos de la Audi Cup anteriores no han tenido demasiada chicha. El Real Madrid frente al Tottenham y el Bayern frente al Milan. Vamos, que se ha hecho de tal forma que la final casi que se ha anunciado desde el principio.
El Real Madrid ganó al Tottenham por 2 goles a 0 sin demasiados apuros. Tampoco con juego espectacular. Ni siquiera bueno. El conjunto inglés tuvo arrinconado al Madrid en varios momentos del partido, presionando fuerte arriba y sin dejar salir con el balón controlado al equipo blanco. Eso sí, vimos a los de Benítez bien ordenados atrás y haciendo un buen trabajo defensivo. Muchos jugadores ayudando en defensa y cerrando huecos al rival para no permitir ocasiones claras. Y lo cierto es que este objetivo se cumplió.
Pero la salida del balón, salvo en los últimos 20 minutos de la segunda mitad, fueron, digamos, regulares. Un Madrid con pocas ideas arriba, previsible cuando creaba ocasiones y lento. Muy lento. Cierto que faltaban los más grandes baluartes del ataque madridista, Cristiano y Benzema (ambos lesionados), pero aún así se puede -y debe- hacer más. Gareth Bale, que jugó donde dice que a él le gusta, en la mediapunta, no consiguió entrar en juego, aunque, eso sí, consiguió anotar. Aunque el portero rival le echó una mano. O la ausencia de una. La cosa es que falló y el disparo de 20 metros acabó en el fondo de la red. El galés sigue perdido.
Los que sí funcionan son Isco y James Rodríguez. Ambos son magia y talento, y los dos combinaron sus cualidades para hacer el primer gol. El centro de Isco al 10 blanco, que llegó al remate sorprendiendo a la defensa, fue fantástico. Milimétrico. Buen gol. Pero mal juego. Eso sí, con pegada. ¿Será suficiente para ganar al Bayern?
El equipo Bávaro ganó con solvencia al Milan. 4 goles como 4 soles. En la primera mitad sufrió más de lo esperado, pero el dominio de los de Guardiola fue casi total. Dominio del balón, del juego y del marcador. Hicieron ocasiones, tocaron incansablemente, con paciencia como le gusta al catalán, llegaron arriba y clavaron 4. En los mejores momentos de los alemanes vimos también una presión arriba para recuperar en las inmediaciones del área muy buena, muy parecida a la que vimos en el Barcelona campeón de tantos y tanto títulos.
Físicamente el Bayern también está dando buenas sensaciones. Cierto que vimos muchos cambios, como en el Real Madrid, pero Bernat parece incansable, Alaba más de lo mismo e incluso Götze parecía tener gasolina de sobra. Además de todo esto, tienen la motivación extra de jugar este campeonato en casa, frente a sus aficionados y en su estadio, el Allianz Arena. Todo esto, además de la enorme calidad de todos sus jugadores, hace pensar que no va a ser nada facil ganarles.
Se espera un buen partido. Se espera espectáculo. Se espera que el Madrid mejore y de mejor imagen. Se espera el despertar de Bale. Se espera la magia de Isco, Götza, James y Thiago. Se espera fútbol. No os lo perdáis.