BARCELONA, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El brasileño Ronaldinho de Assis, uno de los grandes protagonistas del triunfo del FC Barcelona por 4-0 ante el América mexicano en la semifinal del Mundial de clubes, dijo que se siente en Japón como si jugase en Barcelona por el apoyo que recibe de los aficionados, aunque mantuvo que el FC Barcelona no es el favorito en la final.
Ronaldinho celebró el buen comienzo del Barcelona en el torneo, en el que el domingo luchará por el título contra el Internacional de Porto Alegre brasileño, aunque, como ya hizo antes de la semifinal, aseguró que el Barcelona no puede considerarse favorito debido al periodo de aclimatación al país y al cambio horario.
"Hemos hecho partidos mejores", dijo, pese a su satisfacción por la actuación ofrecida ante el América, "pero somos conscientes que la final va a ser más complicada. Sigo insistiendo que no somos favoritos, aún no hemos dormido bien y ellos, en cambio, están muy bien físicamente", comentó el '10' del Barcelona.
Ronaldinho, de todas maneras, también se mostró agradecido por wel afecto que le muestran los aficionados japoneses. "Me siento como si estuviera en Barcelona", comentó al respecto, además de manifestar que, como siempre, se propone "disfrutar al máximo" en los partidos. Después, se refirió a su reencuentro con el Inter de Porto Alegre.
Se trata del rival ciudadano del club de toda su vida, el Gremio de Porto Alegre, en el que Ronaldinho jugó entre 1998 y 2001 antes de dar el salto a Europa para enrolarse en el Paris Saint Germain, donde estuvo dos años antes de llegar a Barcelona, aunque el brasileño aseguró que no será un partido especial por esta circunstancia.
"Jugar contra el Inter no es especial por mi pasado en el Gremio, sino por hecho de estar en la final de un torneo que el Barcelona no ha ganado nunca", concluyó Ronaldinho. Además, advirtió que será una final "muy dura", pues el Internacional es "un equipo muy duro y muy fuerte, aunque tenemos que salir a disfrutar".
MARQUEZ: "ESTANDO A BUEN NIVEL, ES DIFICIL QUE PODAMOS PERDER".
Otro de los protagonistas, el mexicano Rafael Márquez, que marcó el segundo gol contra el equipo de su país, el cual se lo dedicó a sus hijos, se mostró convencido de las posibilidades de éxito del Barcelona en la final ante el campeón sudamericano. "Estando en un buen nivel y en un buen estado, es difícil que podamos perder", dijo.
Márquez, sin embargo, también admitió que "esperaba más" del América, "pero nosotros estábamos más preocupados por hacer nuestro trabajo y no tanto por el rival". En esta línea, no quiso pronunciarse sobre si reflejó "la verdadera diferencia" entre el fútbol mexicano y europeo y dejó la cuestión para los periodistas.
Mientras, el portero Víctor Valdés, también determinante por un par de intervenciones de mérito cuando el partido todavía no estaba resuelto, destacó que el Barcelona hizo "un muy buen partido, con juego bonito". "Esperábamos que el América fuera una dura oposición, y que no lo haya sido creo que fue mérito nuestro", señaló.
Respecto a la final ante el Internacional de Porto Alegre, Valdés apuntó que el rival es "un típico equipo brasileño, con buenas individualidades". "Si será tan abierto o no, no lo sé. Sólo esperamos ganar", concluyó el portero del Barcelona.
