MAJADAHONDA (MADRID), 5 Ene. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Atlético de Madrid, Carlos Bianchi, diseñó para esta mañana una suave sesión de entrenamiento para sus jugadores, después del proceso vírico que sufriera la plantilla y que obligó a aplazar el partido copero ante el Zaragoza de ayer.
A los catorce afectados del día de ayer, se unieron a última hora de la noche Fernando Torres, Pablo Ibáñez, Braulio y Luis Amaranto Perea, que empezaron a sentir los síntomas de la gastroenteritis aguda, al igual que Maxi, el último damnificado por este virus, por lo que no se ejercitaron hoy.
De los enfermos de ayer, José Ignacio Zahínos, Manu del Moral, Antonio López, Mario Suárez, Gabi, Luccin y Francisco Molinero no se ejercitaron al mismo ritmo que los demás y saltaron al césped para caminar durante treinta minutos. El resto, incluido Mateja Kezman, se entrenaron con aparente normalidad y realizaron ejercicios físicos, estiramientos y finalizaron con trabajo de balón.
Por su parte, el guardameta Iván Cuéllar siguió con trabajo específico para ultimar su recuperación junto a Oscar Pitillas, preparador físico-recuperador y el argentino Luciano Galletti estuvo trabajando en el gimnasio.
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