VALENCIA, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El delantero David Villa acabó con la sequía que arrastraba el Valencia en Alemania desde 1966, al ganar al Schalke 04 por 0-1 en la primera jornada del grupo B de la Liga de Campeones, en un partido en el que los de Quique Sánchez Flores mostraron una imagen muy sólida.
La victoria coloca al conjunto blanquinegro líder del grupo B tras el empate a uno entre el Chelsea y el Rosenborg en Londres en el otro enfrentamiento del grupo. El Valencia, fiel a la historia y la estadística, arrancó otra participación más en la 'Champions' con victoria, como había hecho en las cinco ediciones anteriores.
El bloque valencianista salió timorato al césped del Veltins Arena y en parte fue por el mensaje que mandó su entrenador Quique Sánchez Flores al optar por muchos guerreros y pocos generales en la alineación titular. El madrileño encorsetó a su equipo con dos centrales como Albiol y Helguera y por delante de ellos colocó a Albelda y Marchena. Mucha contención y poca creación con este cuadrado de futbolistas.
Esa disposición hizo que el Valencia jugara muy replegado porque los dos futbolistas del centro del campo se movieron en paralelo y no le dieron ninguna profundidad a su equipo. Por si había poca brega en el centro del campo, Sánchez Flores prescindió de la magia de Joaquín y colocó al 'todocampista' Angulo en la parte derecha.
El Schalke, como es habitual en este tipo de encuentros cuando juegas en casa, salió a comerse al Valencia, pero no se encontró al conjunto deslavazado que lo pasó mal ante el Valladolid. Los de Mirko Slomka se toparon con una buena estructura defensiva que repelió el balón hasta el punto de despreciarlo.
Tuvo que aparecer el delantero internacional alemán Kevin Kuranyi con dos remates consecutivos que se marcharon fuera a la media hora de partido, para que el Valencia se aflojara el corsé y comenzara a moverse con criterio y con gusto por el balón.
El primer lanzamiento de los blanquinegros llegó en el minuto 33 cuando Morientes prolongó de tacón una falta sacada por Villa que detuvo el portero. Dos minutos después fue el asturiano el que se fabricó una jugada y obligó al guardameta a emplearse a fondo.
El Valencia fue de menos a más y acabó la primera parte con el mando del encuentro, sobre todo, por la aportación de Silva que cada vez que dejaba la izquierda y se acercaba al centro creaba problemas a un Schalke que a medida que pasó el choque perdió fuelle.
VILLA ABRE EL CAMINO
El Schalke regresó tras el descanso con la misma fuerza con la que comenzó el choque y el Valencia volvió a jugar muy cerca del área de Cañizares. Los alemanes tenían el control del balón, pero apenas creaban peligro, a no ser por alguna salida sin medir de Cañizares. Sin embargo, Villa abrió el camino entre el poblado bosque de jugadores alemanes.
Corría el minuto 63 y Miguel se sacó una pase largo de la chistera que le cayó a Villa que ya buscaba la espalda de la defensa. El asturiano se plantó ante Neuer al que regateó y marcó a puerta vacía. El tanto cambió totalmente los planes de los locales que ahora tenían que dar dos pasos adelante para tratar de equilibrar el choque. Lo primero que hizo fue realizar un doble cambio para darle mayor poder ofensivo.
Sin embargo, Sánchez Flores también movió piezas para refrescar al equipo y dio entrada a Joaquín y Arizmendi. El Valencia tiró de oficio en el último cuarto de hora, no se descompuso y sacó una victoria muy valiosa en Alemania y eso que Lovenkrands tuvo el empate con el tiempo cumplido.
