Y el deporte entró en un túnel

Estadios, canchas, circuitos y pabellones vacíos, el parón del deporte por el coronavirus
Estadios, canchas, circuitos y pabellones vacíos, el parón del deporte por el coronavirus - AFP7 / EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 12 marzo 2021 9:54

Este viernes se cumple un año del inicio del apagón deportivo por culpa del coronavirus

MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -

El 11 de marzo de 2020 muchos espectadores aún estaban viendo deporte bien en directo o a través de la televisión. Los aficionados del Atlético de Madrid estaban de hecho eufóricos tras su enorme resistencia y victoria en Anfield ante el Liverpool por 2-3 en la prórroga. El triunfo rojiblanco fue con las gradas pobladas de aficionados, todo lo contrario a lo que había pasado 24 horas antes en Mestalla, donde el Valencia recibió a puerta cerrada al Atalanta, de la ciudad de Bérgamo, considerada epicentro europeo del virus.

Sanidad notificaba en España ese mismo día 2.000 contagios y más de 40 fallecidos, pero la situación en algunas comunidades ya había provocado el cierre de colegios, mientras que el Gobierno había ordenado el 10 que todos los eventos deportivos del país se jugasen a puerta cerrada para evitar los contagios y la propagación. El país se preparaba para una situación inédita de tener que conformarse con ver deporte a través de la televisión.

Pero en la madrugada del jueves 12, saltaba la noticia en Estados Unidos de la suspensión de la temporada de forma inmediata en la NBA tras conocerse que un jugador de Utah Jazz, que posteriormente se desvelaría que era el pívot francés Rudy Gobert, había dado positivo. En cuanto amaneció en Europa, el deporte comenzó su progresiva parada en todos los ámbitos.

LaLiga anunció que suspendía la competición durante, "al menos", las dos siguientes jornadas, pero ya no volvería hasta mediados de junio, con las finales de la Copa del Rey y de la Copa de la Reina aplazadas sin fecha. Al mismo tiempo, el Real Madrid de fútbol y baloncesto se tenía que poner en cuarentena por el positivo de Trey Thompkins. Comenzaba así un continuo e imparable goteo de aplazamientos sine die en todos los deportes.

La Euroliga paró de forma indefinida y terminó por suspender su temporada sin campeón. La ATP y la WTA pararon por, inicialmente, espacio de seis semanas, mientras que la F1 mantenía su arranque previsto para ese fin de semana pese a un positivo en el 'paddock' en el equipo McLaren. El pulso del 'Gran Circo' duró poco ya que finalmente suspendió el Gran Premio de Australia al día siguiente y todo el inicio del campeonato hasta julio. El Mundial de Motociclismo sí había podido arrancar el 8 de marzo, pero sólo en las categorías de Moto3 y Moto2, y ya no pudo volver a competir tampoco hasta julio y con un calendario exclusivo en Europa.

UEFA anunciaba que aplazaba a la semana siguiente una decisión sobre la Eurocopa de ese verano, pero detenía la Liga de Campeones y la Liga Europa, y la Premier y la Bundesliga se paraban hasta principios de abril, aunque el campeonato alemán aún intentó, sin éxito, disputar la jornada de ese fin de semana. Todos los grandes eventos de la primavera como el Masters de Augusta, las clásicas ciclistas o el Giro tenían que posponerse, pero también, mientras en España se decretaba el Estado de Alarma durante 15 días y aparecían los primeros casos positivos en deportistas, había otros todavía compitiendo por el mundo como los boxeadores del Preolímpico de Londres o los surfistas en el Mundial de Surf Adaptado de La Jolla (California).

TOKYO 2020 TAMPOCO RESISTE

"Aplazado/Suspendido/Cancelado por coronavirus", así eran todos los titulares. No quedó nada que se pudiese disputar, aunque algunos, como Roland Garros, se movieron rápidamente y se reubicaron en el calendario en una inusual fecha otoñal. UEFA suspendió la Eurocopa y la Eurocopa Sub-21 hasta 2021, y la CONMEBOL hizo lo propio con la Copa América. Aún quedaba por saber lo que sucedería con la 'joya de la corona' de ese 2020: los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio de julio, agosto y septiembre.

El 17 de marzo el COI reiteraba su compromiso con la celebración en sus fechas previstas porque aún quedaban cuatro meses para su inauguración y no había "necesidad de tomar decisiones drásticas". Tres días después, con la llama aterrizando en Japón, Thomas Bach advertía que se estaban "considerando diferentes escenarios", mientras muchos países pedían su aplazamiento por la inquietud sanitaria y deportiva de los atletas, encerrados en su mayoría por el confinamiento mundial contra la propagación del virus.

El organismo pedía tiempo y se daba cuatro semanas más para tomar una decisión, con Japón también considerando su no celebración ante el desarrollo de la pandemia. Sin embargo, no pasaron ni dos días cuando llegó el esperado anuncio: Tokyo 2020 pasaba al 2021. El virus también hacía hincar la rodilla al gran evento deportivo de cada cuatro años. El deporte y sus deportistas, confinados y obligados a mantener la forma en casa, 'desaparecían' aunque quedara algún reducto como la exótica liga de fútbol de Bielorrusia.

El 16 de mayo, dos meses después, la Bundesliga lograría ponerse en marcha de nuevo en un momento esperado y seguido como si de la final de la Copa del Mundo se tratara. Poco a poco iría retornando algo de la 'normalidad' deportiva, aunque grandes competiciones como Wimbledon o la Ryder Cup, y eventos de menor renombre, pero igual de vitales en el ecosistema, se perdieron. Fue entonces cuando aparecieron palabras como 'burbuja' y los famosos protocolos para instaurarse en la vida de un deporte nacional y mundial que un año después pelea por recuperar la normalidad de antaño.